1 Huracán: Barovero; Puertas, Goltz, Domínguez, Arano; Sánchez Prette, Leandro Díaz, Barrientos, Poggi; Mendoza, Franzoia. DT: Claudio Ubeda.

1 Central: Alvarez; Espinoza, Raldes, Fassi, Papa; Costa, Méndez, Messera, Cristian González; Arzuaga, Vizcarra. DT: Leonardo Madelón.

Goles: PT: 24'' Vizcarra (C) y 8m Barrientos (H).

Cambios: PT: 30m Imperiale por Messera (C). ST: Desde el inicio Nieto por Mendoza (H), 23m Zelaya por Vizcarra (C), 30m Alan Sánchez por Sánchez Prette (H) y 39m Damián Díaz Arzuaga (C).

Arbitro: Alejandro Sabino.

Cancha: Argentinos Juniors (local Huracán).

Fue muy poco lo que pasó ayer en cancha de Argentinos Juniors. Al encuentro le sobraron 80 minutos. Es que todo se desencadenó en el arranque del juego, donde se vio a los canayas convertir a los pocos segundos y a los locales que igualaron minutos más tarde. Después de ello, se cayeron sobre las áreas sólo un puñado de acciones de riesgos conjuradas por ambos arqueros. Y entre tanta lucha se destacó el debutante Jesús Méndez. Pero al final los jugadores de Arroyito se volvieron con un punto fructífero para borrar de la memoria lo ocurrido dos semanas atrás ante Gimnasia y Esgrima en La Plata.

El comienzo del partido entregó sorpresas a los pocos segundos. El juego lo abrió Cristian González tocando la pelota hacia atrás. A continuación Franzoia pescó el balón y cedió a Sánchez Prette, que se tiró el césped al perder con Méndez. Recorrió algunos metros el volante cuando tocó vertical para la corrida de Vizcarra, quien encaró el área con todos los defensores persiguiéndolo de atrás y definió con zurdazo cruzado para poner a Central en ventaja a los 24 segundos.

El extraño comienzo de juego no despertó mayores dudas en el rival. El globo hizo mucho de lo que había pensando, porque tardó escasos minutos para imponer presencia en el mediocampo con Sánchez Prette y Barrientos, quienes nunca perdían ante Cristian González y Méndez. El dominio local dejaba a Vizcarra y Arzuaga muy lejos de la conversación, y por consecuencia Huracán ganaba protagonismo en área auriazul. Y las respuestas a la buena puesta escena de globito se cristralizaron a los ocho minutos, cuando Barrientos cabeceó con facilidad un tiro de esquina sobre el primer palo y equilibró el marcador.

Ante la igualdad Central fue a la búsqueda de sus ambiciones ofensivas, contenidas ellas con el imprevisto arranque. Paulatinamente el canaya se acercó al terreno de Huracán, teniendo más actividad en las corridas de Vizcarra que en los pies de Arzuaga. Pero cada vez que la pelota llegaba al área visitante sus defensores la recuperaban por impericia de los puntas de Central. Fue por ello que el Kily probó de afuera con un zurdazo cruzado y exigió por primera, y única vez, a Barovero.

En el área de Alvarez, en cambio, las pocas acciones de peligro que hilvanó Huracán fueron más profundas. Porque Franzoia remató débil al encarar en soledad el arco canaya y luego un tiro libre de Sánchez Prette se fue apenas por arriba.

En la segunda parte hubo más precauciones. El miedo a la derrota contagió a los dos y por eso el trámite del encuentro se repartió entre infracciones, reiteradas imprecisiones ofensivas y mínimo protagonismo de los arqueros. Huracán intentó sostener el leve dominio del primer tiempo, pero Central contrarrestó la búsqueda del rival siendo más prolijo con la pelota.

Una escapada de Franzoia que terminó con atajada de Alvarez con los pies y una mediavuelta de Arzuaga que disuadió Barovero fue todo lo que sucedió en las áreas. Porque Arzuaga las perdió todas, Franzoia tenía ya poco contacto con la pelota y en las jugadas detenidas los defensores se impusieron sobre los delanteros.

Con timidez, Central hizo un intento sobre el final para ver si conseguía algo de más de lo que tenía. Pero no fueron convincentes sus avances y el equipo se sintió a gusto con el empate. En verdad Central necesitaba los tres puntos, pero recordando el antecedente que arrastraba en su primer presentación en condición de visitante (Gimnasia), lo de ayer fue alentador.