A pesar que Ricardo Caruso Lombardi pidió diez refuerzos, la venta de Santiago Salcedo es la prioridad de Eduardo López. En Ñuls las decisiones deportivas quedaron postergadas por las demandas financieras de la entidad, que tiene en carácter perentorio la concreción de una transferencia para oxigenar sus cuentas. El delantero, que se encuentra en la ciudad, pidió un resarcimiento económico por la cotización de su pase, valuado en 9 millones de dólares. En lo institucional, se espera para esta mañana la resolución de Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) referente a la asamblea del pasado 15 de mayo, objetada por la oposición por no tener acceso al recinto deliberativo.

Tan frágil es el escenario financiero de Ñuls que la dirigencia aún no pudo responder a las peticiones de Carlos Dávola, presidente de Tiro Federal, para concretar la cesión del volante Iván Pillud y el delantero Leandro Armani, apuntados ambos por Ricardo Caruso Lombardi para incluirlos al plantel leproso. Dávola visitó ayer al mediodía a López en sus oficinas para acercarle sus requisitorias económicas por los jugadores, a lo cual el mandamás rojinegro pidió tiempo.

Es por ello que la transferencia de Santiago Salcedo pasó a ser la tarea prioritaria de López, que se volvió sin una oferta a su visita a la dirigencia de River. Es que a los millonarios López les exigió 9 millones de dólares para ceder al goleador paraguayo, a lo que en Núñez respondieron desestimando la continuidad de las conversaciones. Aunque, en rigor, López está dispuesto a vender al delantero por mucho menos de lo que dice, y por eso hará un intento la semana que viene por retomar el diálogo con los millonarios. Para peor, al conocer su cotización, Salcedo exigió un contrato en sintonía con aquellos números, y a cuatro días de comenzar la pretemporada el cuerpo técnico todavía no tiene a disposición al jugador, que desde ayer se encuentra en la ciudad.

Lombardi espera para esta mañana la vuelta de Salcedo a los entrenamientos, más allá de que es un hecho que el paraguayo no vestirá la rojinegra en el próximo Apertura. El panorama no es alentador, y por ello ayer el entrenador insistió en que "deben venir ocho o diez jugadores". Algunos de los apuntados es Hugo Barrientos, quien pertenece a Huracán, aunque aún no acordó la renovación del contrato y no entrena con el conjunto que dirigir Claudio Ubeda. Andrés Franzoia, cuyo pase pertenece a Boca y acaba de jugar una temporada en el quemero, es el delantero elegido por el entrenador, pero es improbable que Ñuls pueda pagar lo que Boca pedirá por su pase, más aún luego de que el técnico Carlos Ischia decidiera llevarlo a la pretemporada xeneize. Y como en el parque Independencia aún no hay recursos, está pendiente el arribo del volante paraguayo Ernesto Cristaldo, quien tiene todo acordado con los rojinegros y espera que se transmita al papel lo escuchado por teléfono.

Asamblea. Las autoridades de IGPJ prometieron para hoy la resolución del organismo provincial por lo sucedido el 15 de mayo en Ñuls, donde se llevó a cabo una asamblea de socios en la que estuvo vedado el ingreso de la oposición. Inspección ya le tomó indagatoria a más de 30 socios que denunciaron las irregularidades y hoy se dará a conocer el fallo que debe responder a las denuncias elevadas por los socios. Y de acuerdo a lo acontecido en la asamblea, ante la mirada de los propios veedores de IGPJ, se espera que al oficialismo no le aprueben la Junta Electoral conformada en la ocasión para organizar las elecciones que tendrán lugar el 14 de diciembre.