"Yo profeso el fútbol que pregona Marcelo Bielsa. Todo lo que sé lo aprendí al lado de Marcelo, pero tengo mis características de trabajo y quiero que en Ñuls se vean", afirmó Javier Torrente, casi como una declaración de principios, al asumir ayer como entrenador rojinegro. Torrente trabajó diez años como ayudante de campo de Bielsa, reuniendo antecedentes que terminó de seducir a los dirigentes rojinegros para su designación. "Llevo tres años como técnico y el sueño siempre fue trabajar algún día en Ñuls. La oportunidad me llega en un buen momento personal. La idea es que el equipo empiece a sacar puntos y luego podamos darle al hincha el sueño de un campeonato", sintetizó el flamante técnico rojinegro, que debutará el sábado a las 14 ante Banfield.

De tono taciturno, mirada extraviada y hablar pausado, Torrente se muestra reflexivo antes de responder una pregunta. Las analogías con el Loco Bielsa se buscarán en cada conferencia de prensa y cada vez que juegue el equipo. Una década al lado del máximo entrenador que entregó la entidad del Parque Independencia pone a Torrente en un desafío singular: dejarle su huella al equipo para que la comparación empiece a debilitarse. "El lógico, mi nombre está asociado a Bielsa", aceptó Torrente, quien ayer a la mañana fue presentado en Bella Vista antes de dirigir su primer entrenamiento.

"Fui ayudante de Marcelo durante diez años, primero empecé como ayudante personal de él y después como ayudante de campo, también estuve con él en la Selección Argentina. He comenzado mi carrera como entrenador en Cerro Porteño de Paraguay, tuve un paso fuerte por Perú, volví a Paraguay a Libertad y en esta última etapa estuve de nuevo en Cerro", repasó el sucesor de Sensini.

"La mayor cantidad de cosas que aprendí en el fútbol las aprendí al lado de Marcelo, soy del fútbol que profesa. Debido a la realidad del plantel y a la situación del equipo, quizás debamos darle una fisonomía distinta a la propuesta. Hoy sabemos en el lugar en el que nos encontramos, lo que no quiere decir que ese sea el modo de juego para siempre. Los cambios bruscos pueden no ser buenos o que no nos lleven a buen puerto", anticipó Torrente, quien luego aceptó que mantiene diálogo fluido con Bielsa: "Hablé con Marcelo de esta oportunidad, pero son cuestiones que prefiero dejar en la intimidad".

"Intentaremos que el equipo empiece a sumar puntos para salir de esta situación difícil. La idea es exprimir el fútbol del plantel que tenemos, tratar de revertir esta situación en los nueve partidos que quedan. No desconocemos la situación en la que está el equipo. También a este plantel hay que reconocerle que con un grupo no muy diferente ha hecho grandes actuaciones el torneo pasado. Esperamos capitalizar el cambio de ánimo que genera la llegada de un nuevo entrenador", soslayó el segundo técnico contratado por la dirigencia que preside Guillermo Lorente.

Al referirse a la oportunidad que le ofreció Ñuls, Torrente se expresó más pausado: "Soy hincha de Ñuls de toda la vida, he acompañado al equipo a Buenos Aires en colectivo como hincha. Siempre tuve la ilusión de jugar en Primera pero mis condiciones futbolísticas no lo hicieron posible".