DEPORTES › EL ROJINEGRO IGUALO 1 A 1 CON BOCA EN UN PARTIDO INTENSO
Después de un primer tiempo que tuvo varias situaciones de gol dilapidadas, los goles llegaron en la última etapa. Abrió el marcador Belluschi y empató Palacio. La igualdad le impidió a la lepra mantenerse primero. Cedió el primer puesto a River y espera por Central.
› Por Claudio Socolsky
Ñuls (1):Villar (6); Gavilán (6), Aguirre (5), Spolli (6), Ré (6); Cejas (6), Zapata (7), Husaín (5), Belluschi (6); Ortega (6), Scocco (5). DT: Nery Pumpido
Boca (1): Migliore (6); Ibarra (6), Díaz (6), Morel Rodríguez (5), Calvo (6); Ledesma (5), Gago (7), Bilos (5), Insúa (5); Palacio (6), Palermo (4). DT: Alfio Basile
Goles:ST: 17m. Belluschi (Ñ); 22m. Palacio (B)
Cambios: ST: 30m. Peralta por Belluschi (Ñ), Steinert por Cejas (Ñ), 34m. Cardozo por Bilos (B), 35m. Colace por Scocco (Ñ), 37m. Barros Schelotto por Palacio (B), 40m. Marino por Insúa (B)
Árbitro: Héctor Baldassi (regular)
Cancha: Ñuls
En lo que parece una constante en el Torneo Clausura, Ñuls cedió la punta, después de igualar anoche con Boca en el Coloso del Parque uno a uno. Fue un partido intenso, donde los equipos, cada uno con su planteo conocido y estudiado, intentaron llevarse los tres puntos, dejando todo en la cancha. Después de un primer tiempo que tuvo varias situaciones de gol dilapidadas bajo los arcos, los goles llegaron en la última etapa. Abrió el marcador Fernando Belluschi, a los 17 minutos, mientras que Rodrigo Palacio empató para la visita a los 22. La igualdad, finalmente, dejó conformes a los dos, que siguen expectantes en el campeonato.
Fue un primer tiempo que estuvo a la altura de las circunstancias por las que están atravesando Ñuls y Boca. Los rojinegros, intentando progresar en el campo a través del orden, y esperando que Ariel Ortega frote la lámpara para que aparezcan sus genialidades.
Por el lado de Boca, el libreto conocido con el que conquistaron el último torneo. Con Fernando Gago como abanderado, y con la velocidad de Rodrigo Palacio, que ganaba en cada mano a mano con los defensores de Ñuls. Y fue con el delantero que el equipo de Basile pudo abrir el marcador a los dos minutos, pero su derechazo, que buscaba el ángulo más lejano, fue desviado espectacularmente por Justo Villar, que la mandó al córner.
Respondió Ñuls con una buena jugada entre Ortega y Belluschi, que pudo culminar Cejas, pero su disparo de zurda, débil, fue directo a las manos de Migliore. La más clara de Boca en el primer tiempo la tuvo Ledesma, que después de una llegada hasta el fondo de Palacio, la mandó muy por arriba, entrando solo y debajo del arco.
Pudo ser de Ignacio Scocco, después de una habilitación de Ortega, pero el delantero le pegó muy mal y la pelota se fue muy lejos. El ritmo del encuentro, para bien del espectáculo, no bajaba en intensidad. Ante cada ataque de Boca que manejaba bien el medio a través del trabajo de Gago Ñuls respondía con la velocidad de Mauro Cejas, que le ganaba siempre la espalda a Bilos, y los remates de media distancia de Fernando Belluschi (fueron tres en menos de diez minutos).
La mejor de Ñuls pudo ser el gol del partido. Scocco desbordó por izquierda, envió el centro, la pelota le quedó a Ortega, y el Burrito con una repentización evidiable, de taco buscó el arco, pero la pelota fue justo hacia donde estaba Migliore.
En el segundo tiempo, Ñuls mejoró las marcas, especialmente la de Palacio, y metió a Boca en su área. En una jugada preparada, Ortega habilitó a Gavilán, su derechazo encontró rebotó en el palo, la pelota le llegó a Belluschi, que con un zurdazo bajo estableció el uno a cero.
Muy poco le duró la alegría a la Lepra. Se despertó Gago, combinó con Calvo, el lateral llegó hasta el fondo, envió el centro, y Palacio no tuvo más que empujarla a la red. Boca empataba un partido que se le estaba complicando.
La falta de piernas y la mente puesta en lo que viene nada menos que el clásico en Arroyito, obligaron a Pumpido a realizar varios cambios. Parecía que Boca quedaba con algo más de resto, pero la igualdad tampoco era un mal negocio. Sobre el final, todos los ojos estuvieron puestos en Baldassi. Primero ante una falta a Ledesma en el área rojinegra, y después ante un agarrón del Cata Díaz a Ortega, cuando el Burrito encaraba a Migliore.
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