1 Patronato: Bértoli; Graciani, Andrade, Boggino, Márquez; Guzmán, Pereira, Bustos; Acosta, Urresti; Quiroga. DT: Marcelo Fuentes

0 Central: García; Ferrari, Valentini, Lequi, Pérez; Zarif, Vismara, Alderete, Gómez; Monje, Castillejos. DT: Juan Antonio Pizzi.

Gol: ST: 11m Bustos (P).

Cambios: ST: 10m Méndez por Zarif (C), 17m Biglieri por Vismara (C), 24m Toledo por Gómez (C), 31m Casado por Guzmán (P), 34m Gutiérrez por Acosta (P) y 45m Roda por Quiroga (P).

Cancha: Colón (local Patronato)

Arbitro: Alejandro Castro

El tramo final del partido encontró a Central jugando con cuatro delanteros, casi todo el tiempo en el área rival y con el arquero Bértoli yendo de un lado al otro, sacando las pelotas que iban al arco y dejando pasar las que se estrellaron en los palos. Desordenado y desesperado terminó jugando el canaya al ir perdiendo el partido ante un rival con escasas virtudes, pero que lo tomó por sorpresa en un tiro libre para señalar el único gol de la tarde. La caída ante los entrerrianos mantiene a los auriazules en ascenso directo, aunque ahora solo le lleva de ventaja dos puntos a Instituto, tercero en la tabla, y tres a Quilmes, el cuarto.

Central no jugó bien en ataque en el partido con River. La dimensión de aquel encuentro y la conformidad que daba el punto, que mantuvo puntero el canaya, relativizaron los análisis. Ocurre que Central tampoco supo jugar en ofensiva ante Patronato, lo que encendió la alarma del canaya en la tabla de posiciones, donde perdió la comodidad que gozó en las ultimas semanas, producto de una racha de siete triunfos consecutivos que se detuvo ante River.

A Central no le faltó la pelota. Su problema fue no saber qué hacer con ella. No hubo un tiro al arco de Castillejos en todo el partido. El primer tiempo expiró sin pisar el equipo el área entrerriana con decisión. El juego colectivo fue efectivo en la recuperación, pero en la distribución nunca pudo progresar. Monje corría para un lado, la pelota iba para el otro, y Castillejos estaba lejos para sus volantes.

El canaya salió con Méndez en el banco por llegar tarde a las prácticas en más de una oportunidad en las últimas semanas. En su lugar apareció Zarif. Entonces en ataque las salidas eran con una corrida de Ferrari o bien alguna intervención de Gómez. Pero ninguno de los dos aportaron pelotas a los delanteros. Un gol no convalidado a Monje, por fuera de juego, fue el intento profundo del canaya.

Lo de Patronato fue secundario: recostado en su campo, preocupado en defensa, y también con su delantero Quiroga corriendo sin compañía. A pesar de ello, Central no asumía el protagonismo.

Sería en el segundo tiempo cuando el canaya reconsideró su apuesta general. La reacción no será por convicción: Patronato se puso en ventaja con un cabezazo de Bustos, de espalda al arco, al ganar por arriba un tiro libre frontal. Antes García le había tapado un mano a mano a Quiroga, tras un tropezón -y van- de Valentini.

En el resto del partido el monólogo auriazul se intensificó. Porque ni siquiera de contragolpe podía Patronato volver a inquietar a García. Pero en las modificaciones el equipo no se acomodó: salió Vismara, el mejor del equipo en el mediocampo, y apareció Méndez para asumir liderazgo, y luego Toledo y Biglieri para sumarse a Monje y Castillejos.

Patronato plegó filas en su campo y salía del ahogo solo cuando Bustos o Márquez eran los que tenían la pelota. Pero el dominio canaya se diluía al pisar el área rival. Ferrari sorprendió por derecha y perdió ante Bértoli al tirar una pared con Castillejos, Méndez estrelló un tiro libre en el palo y en la más clara Biglieri exigió al arquero local con una mediavuelta sorpresiva.

Central perdió y la lucha por los dos ascensos directos se mantiene abierta. Pero aún depende de su juego.