La oportunidad de abrazar un negocio millonario puso en la misma mesa a dirige

ntes de Ñuls y Central, quienes luego de meses de diálogo concretaron ayer la disputa de dos clásicos amistosos para el próximo mes de julio. El primer duelo de la ciudad se jugará en el Gigante de Arroyito, el segundo en el Coloso del Parque, y ambos con televisación en directo. Queda por definir si se permitirá la asistencia de público visitante. "No es el primer signo de madurez que mostramos entre los clubes", aclaró el presidente canaya, Norberto Speciale. "Hay que demostrar que se puede jugar el clásico", desafió el titular de Ñuls, Guillermo Lorente.

La relación construida el último año entre Lorente y Speciale entregó su primer fruto: con la mediación de la empresa World Eleven, que organiza amistosos internacionales para la Selección Argentina, el próximo mes se jugarán dos clásicos, poniéndose en juego la "Copa de Invierno". El primero se disputará el domingo 22 de julio en el Gigante, y la revancha el domingo 29 en el Coloso. Ambos amistosos iniciarán a las 16 y serán televisados en directo.

En el anuncio de ayer en un hotel céntrico no se habló de los números del contrato firmado por los clubes con la firma organizadora, pero un directivo reconoció a Rosario/12 que cada partido "generará más de cinco millones de pesos", por venta de entradas, derechos de televisación y publicidad.

Las localidades se ofrecerán por Internet (www.ticketek.com.ar) a partir de la semana que viene. La general tendrá un costo de 80 pesos, mientras que las plateas se expenderán entre 150 y 250 pesos, según la ubicación. No habrá preferencias para los socios de las instituciones, por lo cual las entradas se venderán por igual al público.

"Entendemos que este clásico tiene nivel internacional y lo vamos a organizar con los estándares que utilizamos para los partidos de este tipo", prometió Guillermo Tofoni, representante de World Eleven. "Queremos hacer muchos clásicos en la ciudad. Hace tiempo que estábamos trabajando para esto", añadió Tofoni, quien luego admitió su preferencia por jugar los partidos solo con público local: "La idea es que a la cancha concurra la familia, que el padre pueda ir tranquilo con su hijo. Por eso organizamos dos clásicos en una semana, para que el hincha que no pueda ir al primer partido se pueda sacar las ganas al domingo siguiente".

Lorente y Speciale, por el contrario, insisten por la asistencia de parcialidad visitante para cada encuentro. Pero la decisión final se tomará a fin de mes, y una vez consultada las autoridades policiales. En este caso, Ñuls dispondría en el Gigante la doble bandeja de calle Génova, y Central la totalidad de la tribuna que da a espaldas al Palomar.