2 Central: Caranta (6); Ferrari (6), Valentini (6), Peppino (6), Delgado (6); Encina (7), Domínguez (6), Méndez (6), Lagos (4); Medina (5), Coniglio (5). DT: Miguel Russo.

0 Gimnasia: Monetti (6); Oreja (5), Barsottini (4), Blengio (5), Licht (5); Mussis (5), Pouso (5), Miloc (4), Matías García (4); Facundo Pereyra (5), Peralta (4). DT: Pedro Troglio.

Goles: ST: 19m Domínguez (C) y 28m Carrizo (C).

Cambios: ST: Desde el inicio Carrizo (6) por Lagos (C), 23m Cabrera por Miloc (G) y Quiroga por García (G), 32m Cháves por Pereyra (G), 35m Toledo por Coniglio (C) y 43m Freitas por Domínguez (C).

Arbitro: Juan Pablo Pompei.

Cancha: Central

Cuando un equipo está en racha ganadora los hinchas aumentan su tolerancia y bajan sus niveles de exigencias. También los éxitos atentan contra la mirada crítica. Por caso, ayer Nery Domínguez recibió su primera gran ovación aunque jugó mejores partidos que el del ayer, y hubo aplausos para Coniglio, que se la devolvió al rival en casi todas, como también Lagos. Pero Central reemplazó fallas en su ataque con buenos momentos de Encina, se apoyó otra vez en la seguridad de su última línea e insistió hasta que desató el nudo del partido en una pelota detenida. Así, ante un Gimnasia y Esgrima desconcertado, y camino a perder todo protagonismo, el Canaya fue camino a su quinta victoria, con otra buena aparición en el complemento de Federico Carrizo, y quedó tercero, a cuatro puntos de la punta, por ahora en manos de Olimpo.

Si Central estuviera en mitad de tabla, el primer tiempo hubiese quitado la paciencia de sus hinchas. Porque el equipo lució con ganas pero sin profundidad, con Lagos y Medina sin encarar a los defensores, empujando solo Encina con remates de larga distancia que controló Monetti.

Pero no había motivos para preocuparse. Porque lo de Central podía ser pasajero, pero no hacía lo que le pasaba a Gimnasia y Esgrima, que no fue más que un puñado de carencias: dubitativo en defensa, sin juego en el medio, y con delanteros que perdían todas.

Entonces Central hizo usufructo de su imagen recuperada ante los hinchas, y sin caer en la desesperación fue a la búsqueda de la victoria en el segundo tiempo con la convicción de que el rival no iba a generar mayor problema en el área de Caranta. Pero como en ataque Central no lucía con grandes ideas, buscó oportunidades en pelota detenida, primeros con dos remates desviados de Delgado y luego con centro de Méndez al punto penal que cabeceó Domínguez al segundo palo, en perfecto movimiento, para sacar ventaja.

Así como Gimnasia no merecía llevarse un punto del Gigante, Central había desparramado suficiente esfuerzo para ganar el partido, incluso a pesar de que Medina la tiraba larga y Coniglio perdía todas. Pero fue el propio goleador Canaya el que indicó el camino hacia el segundo tanto, al recibir un involuntario pase atrás de Mussis y abrir rápido hacia la izquierda para que Carrizo domine, pise el área y grite el segundo con zurdazo cruzado.

No fue el mejor Central el que jugó ayer. Pero fue otra vez claramente mejor al rival. Gimnasia se dio por abatido con el segundo gol y se fue del Gigante sin un remate al arco, a excepción de un disparo desde 35 metros de Licht que tomó por sorpresa a Caranta aunque se fue desviado. Hace un mes atrás, el Lobo platense liderada las posiciones, era el gran candidato, y Central penaba entre los últimos. A poco de llegar a la mitad de la temporada, el Canaya no para de escalar en la posiciones, ganado uno y otro partido, y prometiendo no parar hasta ser puntero.