1 Douglas Haig: Alvarez; Soto, Gioda, Quintana; Marcolongo, Ponce, Levato, Seregalles, Achucarro; Mazza, Alba. DT: Reinaldo Merlo.

1 Central: Caranta; Ferrari, Valentini, Peppino, Delgado; Encina, Domínguez, Méndez, Lagos; Medina, Toledo. DT: Miguel Russo.

Goles: PT: 13m Toledo (C). ST: 6m Mazza (DH).

Cambios: PT: 25m Casteglione por Medina (C), 29m Cabalucci por Ponce (DH). ST: 13m Bareiro por Toledo (C) y Aranda por Alba (DH), 37m Carrizo por Lagos (C) y 39m Barreto por Seregalles.

Arbitro: Carlos Maglio

Cancha: Douglas Haig

Expulsados: PT: 22m Valentini (C). ST: 24m Bareiro (C).

Como la semana pasada ante Almirante Brown, los errores propios empujaron a Central a un resultado inesperado. Pero no así el juego, que volvió a ser de supremacía sobre el rival y entregando las señales que explican su liderazgo en el Nacional B. Ayer, Douglas Haig le sacó un punto porque el canaya jugó con uno menos por más de una hora, y con dos menos en los últimos 25 minutos del partido. Así y todo el local necesitó de un extraordinario gol de Mazza para empatar un partido que el auriazul ganaba con tanto de Toledo. Valentini y Bareiro fueron los expulsados por juego brusco que condicionaron la suerte del puntero.

De un tiro de esquina Central encontró en Toledo el goleador que buscaba, cabeceando sobre la línea un balón que desvió sobre el primer palo Peppino, también ganando por arriba. Iban menos de un cuarto de hora y Central lucía acomodado a las circunstancias del partido en Pergamino, ganando e imponiendo condiciones, ante un Douglas Haig bien animado pero ineficaz para jugar cuando tenía la pelota.

A pesar del dominio, Central era débil sin la pelota, recurriendo a infracciones para detener los ataques del rojinegro. Valentini fue brusco en un corte en mitad de cancha y vio la amarilla, y al rato nomás volvió a ser torpe en un pase atrás que quedó corto, bajando a Achucarro afuera del área y viendo la segunda amonestación.

Apenas iban 22 minutos y Douglas Haig no tenía una llegada al arco de Caranta, pero jugaba con uno más. Aquella ventaja no apartará al auriazul de su protagónico, aunque tendrá menos recursos disponibles para el ataque, saliendo Medina para que ingrese Casteglione.

En el segundo tiempo llegarán sus oportunidades para Douglas Haig. Porque el local encontrará el empate en una gran definición de Mazza al ángulo, con derechazo cruzado, luego de una corrida horizontal sobre el campo de juego, de izquierda a derecha, eludiendo volantes y defensores. El zapatazo al ángulo dejó a Caranta en el rol de testigo, siguiendo la pelota con la mirada hasta que infló la red y se resignó.

Pero más problemas que el propio gol del empate le trajo a Central la roja a Bareiro, a los 24 minutos, por codazo a Quintana. Nada que discutir al árbitro. Para el canaya quedaba resistir ante un rival tentado y obligado a ir por el triunfo.

Lo intentará Douglas Haig en cada avance, siendo claro cuando el traslado de la pelota lo hacía Mazza, pero en el área canaya los delanteros locales no tuvieron mayor injerencia. Porque Alba estaba acorralado en la marca y Achucarro algo más lejos de Caranta, preocupado por encontrar socios de juego en los volantes.

El equipo de Reinaldo Merlo se perderá en sus ilusiones. Y Central, firme en defensa a pesar de tener dos jugadores menos, se las ingenió para intentar la hazaña. Una buena triangulación entre Encina, Lagos y Méndez se frustró por fuera de juego y casi sorprende Delgado con un remate de larga distancia. Así terminó jugando Central, en el área rival y sobreponiéndose a sus propios tropiezos. Y como Sarmiento perdió, con el empate el canaya amplió la diferencia con el cuarto en la tabla.