El debut de Fabricio Formiliano, la salida de Ignacio Scocco y la permanencia de Mauro Formica en el banco de suplentes son las decisiones más relevantes que evalúa Lucas Bernardi para formar el equipo de Newell's que jugará el domingo en Arroyito. Así, Lucas Mugni ingresará por el goleador y el refuerzo uruguayo debutará por Nehuén Paz. Luego de la práctica de fútbol en Bella Vista, anoche los jugadores se trasladaron al Coloso a participar del banderazo de los hinchas. En el estadio la policía detuvo a tres simpatizantes que portaban armas blancas (foto) y se produjeron corridas en la popular, aunque sin producirse mayores incidentes entre más de 25 mil personas que asistieron a la tradicional celebración.

Bernardi todavía no tiene resuelto cómo jugar el domingo ante Central. Pero en la práctica de ayer probó al equipo titular con variantes que dejan atrás lo experimentado en el debut ante San Martín. En primer lugar, la defensa volverá a parar con línea de cuatro. Así, Franco Escobar será lateral por derecha, Marcos Cáceres el compañero en la zaga central de Sebastián Domínguez y por izquierda estará Emanuel Insúa.

En el mediocampo Bernardi cambia mucho. Porque el volante central no será Cáceres y quizá tampoco Hernán Villalba, ya recuperado de un desgarro. El que entrenó ayer en esa posición es Formiliano, quien firmó contrato con Newell's el pasado viernes y se sumó a las prácticas en lunes. Pero además el técnico tiene pensando sacar del ataque a Scocco para sumar un volante y quien se queda, hasta ahora, con ese puesto es Mugni y no Formica. El ex Colón todavía no está habilitado --Newell's no pagó su préstamo a Flamengo-- pero se espera para hoy su permiso para volver a jugar con la rojinegra. De igual modo, la gran duda de Bernardi es jugar con Mugni o Formica y hoy se definirá en la última práctica de fútbol de la semana.

Con estos interrogantes se fue anoche el entrenador al Coloso a participar del banderazo. Más de 25 mil hinchas se acercaron al estadio y entre tantas banderas se destacó una en la platea baja: "Los ídolos se respetan: (Diego) Mateo más diez", decía el trapo, en apoyo al jugador más querido por los hinchas.

Los simpatizantes rojinegros empezaron a ingresar al estadio a las 18 y en el operativo de prevención la policía detuvo a tres hinchas que portaban armas blancas, uno de ellos con dos machetes sobre su cintura. Luego se produjeron algunas peleas en la popular baja, en los únicos incidentes de la celebración. Los jugadores llegaron al Coloso pasadas las 20 y entre fuegos artificiales gritaron al unísono por un triunfo el domingo y la presencia de Mateo entre los titulares.