1 Newell's: Pocrnjic (7); Advíncula (4), Domínguez (4), Moiraghi (5), Voboril (5); Amoroso (6), Prediger (6), Quignon (5); Maxi Rodríguez (6), Matos (5), Scocco (5). DT: Diego Osella.
0 Tigre: Ibáñez (6); Galmarini (4), Godoy (5), Echeverría (5), Sosa (5); Menossi (6), Iñíguez (6); Itabel (5), Morales (6), Janson (5); González (-). DT: Pedro Troglio.
Gol: ST: 30m Formica (N).
Cambios: PT: 12m Luna (5) por González (T). ST: Desde el inicio Sills por Prediger y Formica por Quignon (N), 12m Rincón por Itabel (T), 21m Rodríguez por Iñíguez (T), 25m Isnaldo por Matos (N).
Arbitro: Patricio Loustau.
Cancha: Coloso del Parque.
Incidencias: PT: 35m Pocrnjic (N) le desvió un tiro penal a Morales (T).

En solo dos fechas, Newell's encontró la serenidad que no tuvo en dos años. El equipo alcanzó la segunda victoria del torneo, en su reencuentro con la gente. El presente tiene a la Lepra con números ideales, pero que no permiten entusiasmarse a futuro. Así, como jugó los primeros dos partidos, lo que viene no tiene por qué ser bueno. El azar en un rebote para el gol de Formica y las manos de Pocrnjic fueron los responsables de la victoria ante Tigre, en un final de partido donde todos pedían la hora.

Newell's es un equipo que juega al pelotazo, literalmente. A eso jugó toda la tarde, a excepción de los primeros 20 minutos. En esos primeros minutos, Newell's asumió todo el protagonismo y llevó el partido a campo rival. Pasaron los minutos. el local se cansó y empezó a moverse en su campo, entregando a Tigre el mando, a pesar de las limitaciones de este rival. La visita se reposó en las gambetas de Morales y la voluntad del resto, no más, pero igual apretó en cada pelota parada. Pocrnjic sacó en la línea un toque de Itabel que sorprendió por el segundo palo en tiro de esquina, y luego le atajó un penal a Morales, a quien esperó en la definición, en infracción -leve, mínima- de Advíncula al propio enganche.

En el complemento vino lo peor de la Lepra, pero también el triunfo. Lesionado Quignon, Osella buscó cambiar con el ingreso de un muy flojo Sills, y de Formica por Prediger. El diez participó mucho pero siempre en soledad, como Matos, que debió jugar con las pelotas largas que le tiraban.

La apatía leprosa animó a Tigre, que fue por la victoria. Acorraló a Newell's y puso muchas pelotas en el área que generaron incertidumbre. Se escucharon los primeros silbidos. Newell's no jugaba para ganar pero el azar lo premió: Voboril lanzó un centro bajo y en el rebote la pelota le quedó a Formica para que empuje con arco a disposición. Desde entonces Newell's pasó a defender y esperó el final del partido, desconfiado de su propio juego, incluso cuando logra puntaje perfecto.