CULTURA / ESPECTáCULOS › LA CONSPIRACIóN, DE PAUL HAGGIS, DESTACABLE FILM SOBRE IRAK
› Por Leandro Arteaga
La conspiración. Estados Unidos, 2007
Dirección: Paul Haggis.
Intérpretes: Tommy Lee Jones, Charlize Theron, Susan Sarandon.
Duración: 121 minutos.
Salas: Monumental, Del Siglo, Showcase, Village.
8 (ocho) puntos
La semántica de victoria quebrada desde una bandera, la norteamericana, que es izada al revés. Por este gesto, síntesis magnífica, habrá que recordar a La conspiración como uno de los mejores títulos del último cine norteamericano. De narración pausada, con elementos que agregan un misterio paulatino, crítico y descorazonado, más el protagónico insustituible de Tommy Lee Jones.
Desde este acto sígnico de orgullo patrio, tal como lo corroboran las muchas banderas emplazadas en ésta y en cualquier otra película estadounidense, puede desandarse el camino que propone La conspiración. Izar una bandera que es emblema de elección de vida de su protagonista, un militar retirado que debe dar con el paradero de su hijo, presuntamente vuelto de Irak. Sólo el celular del joven soldado testimonia de modo parcial. Guardado junto con una Biblia de bolsillo, quemado e inútil, devela algunas imágenes rotas para la mirada desconcertada del padre.
La bandera que flamea al viento guarda las mentiras crueles. Aquellas que contradicen la heroicidad y el supuesto cuidado por los hijos de la nación. "Enviar democracia a un nido de ratas" es lo que piensa y dice el padre dolido. Grito que es nexo con Vietnam (su Vietnam) y los '60. Así como respecto de la contienda aquélla, son también ahora las imágenes aquí las que el teléfono celular guarda las que develan otra historia. Cruel y sin alma.
Así como estos fragmentos ofician, de a poco, como pequeñas piezas de puzzle, la investigación policial involucra compañeros de combate. Noches de juerga compartida. Drogas. Tráfico ilegal. Todos rasgos adquiridos como modo de supervivencia militar. Como manera de soportar el mal trago de la experiencia bélica. ¿Qué es, entonces, lo que hubieron de hacer en Irak? ¿Qué esconden los soldados? ¿Qué ocurrió con David, el soldado hijo, de nombre bíblico?
La cordura familiar parece a punto de saltar por los aires. Hank y su mujer (Tommy Lee Jones y Susan Sarandon) dejan asomar problemas anteriores. No es el único hijo en combate. El silencio, los gestos breves, son lo que queda como vínculo. La bandera, mientras tanto, baila su danza de barras y estrellas.
Paul Haggis guionista y realizador de La conspiración fue también el responsable de la sobrevalorada Crash, vidas cruzadas, premiada con el Oscar al mejor film en 2005. Sin el juego narrativo ingenuo de su anterior film, Haggis adopta ahora una actitud profundamente crítica. Más cercana al espíritu de otros guiones suyos, como La conquista del honor y Cartas desde Iwo Jima (2006, ambas de Clint Eastwood). En el marco, también, de otros films igualmente contestatarios, aún con estreno comercial pendiente, tales como Redacted (2007, Brian de Palma) y Grace Is Gone (2007, James Strouse).
La conspiración se inscribe en lo mejor del cine norteamericano. Tommy Lee Jones nominado aquí al Oscar ha alcanzado, sin dudas, un sitial de honor. Participar de un film semejante significa también compartir sus premisas. No es sólo buena actuación. El cine, como modo expresivo, artístico, provoca, seguramente, el grito de ayuda que corroe a su personaje. Toda una película.
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