El patrimonio de los museos de Bellas Artes Juan B. Castagnino y de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro) se enriqueció con la donación que realizó el artista León Ferrari durante su paso por la ciudad, en el marco de la inauguración de la muestra antológica que se desarrolla en el Castagnino. Precisamente, un día antes de la apertura fue el propio Ferrari el que propuso la donación de dos piezas que él mismo seleccionó entre las cinco elegidas previamente por el equipo del Museo y el secretario de Cultura municipal Fernando Farina. De esa manera, Jaula con aves y Sin Título son las piezas que pasaron a formar parte de la colección Castagnino + Macro, y que hasta el próximo domingo estarán en exhibición en el edificio de Pellegrini y Boulevard Oroño.

La primera de ellas pertenece a la serie Excrementos 2004-2008, y reproduce jaula, aves, flores y estampa del Juicio Final con medidas variables. La segunda fue realizada entre 1992 y 2007, y es una instalación realizada a partir de veinte botellas con imágenes impresas y objetos incorporados a través de collage y ensamble, de medidas variables.

Los responsables de seleccionar las obras explicaron que "ambas piezas son sumamente emblemáticas, ya que la primera de ellas forma parte del discurso más radical de Ferrari, enraizado en la trama de la civilización occidental y cristiana y, la otra, una instalación con botellas que es sumamente representativa de una vertiente objetual que el autor desarrolla desde los años 60. Tanto una como otra son históricas dentro del conjunto del artista, y permiten continuar con el programa de incorporaciones del Castagnino+Macro debido a sus características".

Por su parte Roberto Echen, director artístico de Castagnino+Macro, destacó la donación al explicar: "El nos donó unas cuantas obras, que hacen que seamos la institución que tiene más títulos de Ferrari en el país, y estas dos engrosan ese patrimonio. Y lo que me parece interesante en relación a Jaula con aves es que es una especie de work in progress. La obra se basa en una jaula con pájaros, la jaula no tiene piso y los excrementos de los pájaros terminan en la reproducción de algún Juicio Final de aquellos famosos, como el de Miguel Angel o algún otro que puede ser más del pre Renacimiento. La idea es que esas láminas vayan siendo interferidas por los pájaros que van haciendo sus deposiciones desde la jaula. Entonces esa obra nunca tiene un resultado único o definitivo, sino que lo que va quedando siempre va cambiando. Se termina una lámina y pasa otra".

"Creo que donar éso, como gesto de León Ferrari, es fantástico, es algo que tiene que ver con nuestro concepto de museo contemporáneo, es una obra que se va produciendo todo el tiempo", remarcó Echen, que en relación a la instalación distinguió: "Es una obra paradigmática de Ferrari y para nosotros es un privilegio poder contar con ella. Aunque él también la fragmenta y nosotros contamos con una parte. También, como toda obra de León Ferrari, es reproducible, lo cual hace que sea muy interesante tener el objeto como donación, porque estamos siempre en el límite de éso que es el `único` (el unicum que León Ferrari ha cuestionado toda su vida) y la reproductibilidad".

A esas donaciones se sumaron además las que Ferrari hizo de dos batías realizados junto a Ricardo Pons en 2004. "Este ingreso es más que significativo ya que en este momento el equipo del museo está revisando su colección de video﷓arte contemporáneo con el fin de enriquecerla con diferentes líneas de ese tipo de producción", destacaron desde el Museo respecto a las obras Casa Blanca y Lombrices, ambas realizadas en formato DVD color y con sonido. "El video además como formato tiene todo que ver con esta posibilidad de reproducirlo y, sobre todo, de difundirlo", completó el director artístico.