No es la urgencia lo que caracteriza a El Centón, la publicación que llevan adelante Gary Vila Ortiz y Fernando Quaglia. Porque no hay rigidez en sus lapsos de edición, y esos períodos que se prolongan cómodamente entre cada número, alientan una lectura que no puede estar marcada por la prisa. Entonces El Centón se convierte en una revista para ser abordada con calma. Textos como El reencuentro, el cuento inédito de Jorge Riestra que encabeza el número de verano 2008/2009, octava edición que esta noche, a las 20, tendrá su presentación en la Biblioteca Argentina Juan Alvarez (Pasaje Alvarez 1550). Acorde al carácter gratuito de la revista literaria, el encuentro tendrá entrada libre, y servirá además como homenaje al escritor rosarino.

Es justamente la figura de Riestra la que atraviesa este octavo número, y desde la tapa misma de El Centón --con su particular disposición horizontal, y con Chachi Verona como ilustrador central-- se dispara "El reencuentro". A esa obra se suman "La recepción de James Joyce en la revista Sur", firmada por Noemí Ulla, mientras que Gabriela García Cedro recupera la historia de Abel Rodríguez, el rosarino que (según la mágister en literatura hispánica de la Universidad de Michigan) se situó a la izquierda del grupo Boedo y que propuso "una relectura de los parámetros para comprender a esta serie de escritores, hasta hoy condenados por escribir mal".

Un amplio punteo de Blas Matamoro relacionado con "La novela latinoamericana" antecede a la página poética que incluye obras de Rubén Echagüe, Roberto Retamoso y Ferreira Gullar, "uno de los poetas más importantes de Brasil", según José Ferrero. Justino Ricardo Caballero es el autor de "La ciudad y el periodismo de ayer", y el propio Vila Ortiz el responsable del segmento jazzístico. En su columna "Jazz y memorias personales", Gary habla del swing. "El almanaque tanguero de Julio Corredera" va completando el tránsito hacia esa falsa contratapa.

Porque es una enorme doble tapa la de El Centón, y es Inés Santa Cruz la responsable de reflexionar sobre la figura de Riestra, el gran escritor rosarino, de quien se incluye además un mensaje personal: "Querido Gary, te envío lo que a través de Sebastián me pediste para El Centón. Van tres textos, dos escritos no en los comienzos de la larga marcha, pero casi, y uno de estos tiempos. Va también un compacto que contiene un cuento de 1989. A mí me parece rescatable, pero la publicación queda en tus manos. Si, por cualquier motivo, necesitaras más material, mi cuaderno de notas está sembrado de prosas breves en estado de edición. Te agradezco la invitación. Hemingway escribiría: es un gesto que palía la soledad del escritor".