En mayo de 2006, Sergio "Manchi" Milioto analizaba en estas mismas páginas el camino que iba transitando al frente de Asaltimbanqui, el grupo con el que logró darle un tono propio a la música balcánica pero que, cuando el género comenzó a ganar adeptos Kusturica mediante, viró hacia un terreno más vinculado con el blues y el jazz gitano. Por esa época, Milioto ya consideraba como una falta de honestidad amoldarse a los giros comerciales. Poco tiempo después, el cantante, guitarrista y compositor le puso fin al grupo y se sumió en un silencio que se prolongó por algo más de dos años. Coherente con aquella postura, en su regreso a los escenarios Milioto no buscó sacar rédito de lo sembrado bajo el nombre de Asaltimbanqui, y le dio forma a nuevas canciones que hoy se presentan bajo el título de Perro Ciego Fulton, proyecto que en formato de cuarteto se presentará mañana a las 22, gratis, en El Cairo (Santa Fe y Sarmiento).

Detrás del flamante título se dibuja la historia de un músico que pierde la vista persiguiendo a la fama. Ya ciego, decide volver a trabajar, pero al momento de solicitar algún tipo de respaldo oficial para poder hacerlo, las puertas se le cierran. La figura representa parte del desencanto sufrido por el compositor: "Haber parado tuvo que ver un poco con el cansancio, o tal vez por la necesidad de decir algo nuevo que todavía no había explorado musicalmente. Rosario siempre tiene ese costado complejo en cuanto a la producción, se agota demasiado pronto. Por otro lado no hay políticas de cultura que avalen el trabajo de gente con trayectoria, con muchos años haciendo música. Entonces a veces uno se cierra. De ahí este tiempo que me tomé para ver qué hacer, para dónde ir. Además cuando alguien hace algo propio, y que no está aceptado por los parámetros comerciales, a uno lo lleva a una reflexión, a un silencio".

Acompañado por Paula Croci en bajo, Sebastián Romero en piano y Pilar Morchio en batería, y consciente de que "el que crea siempre tiene la necesidad de mostrar lo que hace, sino sería totalmente excéntrico", Milioto regresa ahora con nuevas canciones, pero también con aquellas con las que ya demostró su talento para recuperar géneros de la vieja Europa y desde allí contar sus propias historias, sin ánimos de perseguir el enigmático halo de rosarinidad que a tantos desvela.