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Un domingo como tantos compré Página/12 y leyendo la página de cultura de Rosario me encontré con la habitual crítica de Julio Cejas, esta vez a la obra de teatro Moderna donde actúa su hijo Gabriel. Yo mismo había escrito algo sobre la obra hacía unos días en ClubdeFun, y coincidí con la mayoría de las apreciaciones vertidas, pero me quedé con una pregunta rondando en la cabeza que decidí compartir con los lectores de ClubdeFun, a través de la página de Facebook, mediante el siguiente posteo: "Sin ánimo de atacar, sólo de pensar y dialogar sobre las prácticas en el periodismo cultural de la ciudad. ¿Es ético que Julio Cejas publique en Rosario/12 una crítica muy halagadora de la obra Moderna donde actúa su propio hijo y ni siquiera aclare la relación al lector?".

Se trata de una pregunta sobre Etica Periodística que intentaba abrir un debate al que yo mismo hice el primer aporte: "Personalmente creo que lo correcto hubiera sido excusarse y dejar que un colega del medio escriba sobre esta obra, y si decidiera escribir al menos hacerse cargo de la inevitable carga subjetiva que la relación impone a la mirada". Una simple opinión, en busca de cotejarse con otras opiniones que algunos periodistas de la ciudad fueron dejando en ese espacio. Me pareció un caso muy particular y llamativo, digno de análisis al punto que envié la misma pregunta al consultorio ético de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano a cargo del experto en ética periodística Javier Darío Restrepo.

Como profesional de la comunicación, coordinador del sitio web de la UNR, editor la revista cultural Los Anillos de Saturno, director del proyecto experimental ClubdeFun y, sobre todo, docente universitario de periodismo estoy muy acostumbrado a interpelar mis propias prácticas profesionales, las de mis colegas, y someterlas a un análisis crítico. Llevo adelante ese ejercicio con mis alumnos, o con otros colegas en espacios como el ciclo Estados Alterados, Emergencias en el Periodismo Cultural, y mi única intención fue generar un debate que nos enriquezca a todos.

No creo en un periodismo objetivo, creo que un periodista cuando articula un discurso en determinado contexto histórico socio cultural lo hace desde un lugar siempre subjetivo y que es bueno develar ese lugar al lector. En este caso particular considero que haber aclarado el parentesco hubiera permitido al lector mejor información sobre el contexto de los sucesos para tener una idea acabada del origen y la perspectiva de los hechos, sin por eso invalidar la crítica, sino más bien dándole más valor.

Es un simple debate de ideas, un cruce de opiniones, que en la red lamentablemente tendió a personalizarse. Soy tan respetuoso de la trayectoria de Julio Cejas como de la de cualquier colega, pero eso no me impide tener una mirada crítica hacia su producción, la cual valoro enormemente como contribución al teatro regional. Creo en las redes sociales como plataformas que aportan a una comunicación más horizontal y por eso el planteo se hizo en ese espacio. ClubdeFun no es un proyecto comercial, por lo tanto no importa si el contenido se publica en nuestro sitio, en Youtube, Facebook o Twitter. Lo que importa son las ideas.

* Licenciado en Comunicación Social.