Luego de un encuentro celebratorio, festivo, Los Shocklenders dejaron como legado La hora del postre, Ep de cuatro canciones con el que la banda rosarina empezó a trazar su futuro. Y mientras nuevas canciones van surgiendo para alimentar un inminente disco de larga duración, Tato Vega (voz), Piturro Benassi (guitarras y coros), Hernán Benegas (bajo y coros) y Francisco Pesado (batería y coros) decidieron volver a escena para darle ruedo a estas obras que vienen a saldar un vacío autoral de casi dos décadas. Mañana, a las 21, el cuarteto las recorrerá en Teatro Vorterix (Salta 3519).

Fue en el marco del reencuentro de 2014 cuando los músicos le dieron vuelo a las cuatro composiciones de La hora del postre. "Empezamos a ensayar y a divertirnos, entonces armamos estas canciones y las grabamos", resume Vega sobre esas obras que Francisco Pesado terminó de postproducir en México. Desde hace un mes, los preparativos para el lanzamiento del Ep derivaron en nuevos ensayos y, a su vez, en flamantes creaciones. "Ya tenemos cinco canciones. Si podemos, y llegamos, sería ideal poder grabar el disco completo, porque saldría súper fresco", se entusiasma el cantante.

En ese marco, estas cuatro canciones no deben entenderse como un anticipo del disco en preparación. "La hora del postre fue algo bastante superficial. Ahora tenemos más tiempo, estamos más tranquilos y estamos profundizando un poco más en las canciones, tratando de volcar la madurez de todos a nivel musical, en los arreglos y la composición", aclara Vega, que asegura que el sello de Los Shocklenders se sostiene en cada obra. "Si no estuviera eso presente no habría banda --remarca--. Somos cuatro personalidades distintas, muy fuertes. Todos tiramos con la misma presión, que crea una energía con todas nuestras influencias individuales. Antes era una foto más de Rosario, lo que nos gustaba de otras bandas. Ahora todo ha adquirido otro sello. Cada uno como persona tiene una huella de lo que es, entonces donde tocás dejás marcado lo que sos".