Luego de la conformación en Buenos Aires de la Asociación Civil Managers Musicales Argentinos (ACMMA) --entidad presidida por Ana Poluyan, responsable del management de Los Pericos--, Rosario/12 dialogó con representantes de renombradas bandas locales para conocer más sobre el desarrollo de la actividad en la ciudad. De esta manera, Cristian Narváez (manager y bajista de Cielo Razzo), Maximiliano Bueno (Bulldog), Lucas Olivan (gestor de Los Vándalos y bajista), Verónica Palacios (Rosario Smowing) y Mario Giacomini (Coki & The Killer Burritos) opinaron acerca de dicha labor en Rosario, valoraron el rol de la ACMMA, brindaron su visión sobre la actividad musical local y las particularidades de su labor.

"Si bien aquí aún no estamos agrupados formalmente, existe un notable grado de compañerismo entre bandas como Cielo Razzo, Los Vándalos, Coki & The Killer Burritos o Bulldog, por ejemplo. Nos pasamos información, y armamos fechas en conjunto", expresó Narváez. Similar evaluación realizó "Kutu" Olivan de Los Vándalos: "Hay gran camaradería entre nosotros", dijo. Mario Giacomini, de Coki & The Killer Burritos, agregó: "Compartimos información para unificar criterios. En Rosario no hay demasiados lugares para tocar y no podés repetir constantemente. Entonces para salir al interior, nos asesoramos con managers de otras agrupaciones", señaló.

Consultada sobre las dificultades de su oficio, Verónica Palacios, promotora de los conciertos de Rosario Smowing, explicó: "En la ciudad aún hay algunas trabas que obstaculizan la profesionalización de nuestra actividad. Es fabuloso que se puedan generar espacios como la ACMMA, en donde haya intercambios de experiencias y conocimientos", aseguró. Maximiliano Bueno, socio flamante de la ACMMA, y quien gestiona a Bulldog desde Buenos Aires, consideró: "Nuestra labor implica una gran carga horaria. Son muchos los ítems a tener en cuenta para que la carrera del grupo, una gira o un show, sean exitosos. En la actualidad, las redes agilizan contactos con todo el planeta. Hay muchas más posibilidades".

Narváez y Olivan cargan una preocupación extra: son músicos y también llevan las riendas de sus respectivas agrupaciones. "Hay que estar en todo; seguridad, armado, publicidad, dónde realizar el show y otros factores. Trato de separar las cosas, pero igualmente disfruto", afirmó el bajista de Cielo Razzo. De modo semejante, el encargado de pautar los recitales de Los Vándalos, manifestó: "No es fácil. Yo a la vez soy el bajista, así que derivo cosas en gente de confianza. Por suerte, como Los Vándalos es una banda de muchos años, los interesados se comunican con nosotros, pauto condiciones y cierro el show", completó. Desde su óptica, Giacomini comentó que a veces pueden surgir tensiones en los grupos: "En nuestro caso, con Coki nunca tuvimos problemas. En la banda hay gente de distintas edades que se respeta mutuamente".

La escena local

Rosario ha sido siempre fuente inagotable de expresiones culturales, pero la realidad de los actores involucrados aún es compleja. En ese sentido, los representantes locales señalaron casi uniformemente que todavía faltan espacios para realizar conciertos. Olivan, de Los Vándalos, especificó: "Como banda que convoca entre setecientas y mil personas nos resulta difícil, porque hay dos o tres lugares disponibles para realizar un show con esa cantidad de gente". Palacios (Rosario Smowing), añadió: "Si tu agrupación convoca a 200 personas es un tema, porque tenés plazas que albergan menor cantidad de público o, al contrario, mucho más. Hay espacios destacables, como por ejemplo el Galpón de la Música. Lo que pasa es que al ser un lugar viable, en relación a los costos de otros sitios, tiene la agenda muy completa rápidamente", comentó la manager.

Por su parte, Mario Giacomini ratificó que Coki & The Killer Burritos tiene buena llegada al público local, pero esta situación es distinta al resto de los grupos jóvenes. "A las bandas nuevas se les complica acceder a espacios dignos. A veces se necesitaría mayor acompañamiento en ese sentido", lamentó. Desde Cielo Razzo, Cristian Narváez mencionó además el factor económico: "Actualmente hay un promedio de entre un 40 y 50 por ciento menos de venta de entradas, tanto a nivel local como nacional. La situación es compleja por la pérdida del poder adquisitivo y por la limitada cantidad de lugares para tocar".

Como referente de Bulldog, Maximiliano Bueno declaró: "Conozco la realidad de la escena musical rosarina. Estoy en permanente contacto con la ciudad y te puedo decir que el nivel de las bandas es de lo más importante a nivel nacional. El problema es que hoy en día las condiciones para avanzar y alcanzar otros niveles son reducidas, por la gran cantidad de grupos que hay. Entonces el trabajo resulta complejo", sentenció.

Detalles sobre la ACMMA

En cuanto a la Asociación Civil Managers Musicales Argentinos, Rosario/12 consultó a su presidenta, Ana Poluyan, quien brindó detalles sobre la misma: "Hay que aclarar que la Asociación no es un sindicato. Fue constituida formalmente el 8 de junio, así que nos falta un camino muy largo por recorrer en cuanto a convocatoria de asociados de otras ciudades y provincias. Estamos en un proceso de crecimiento paulatino y por el momento no podemos convocar a todos en tan poco tiempo. Queremos juntarnos, ayudar a que el sector tenga mejores condiciones, profesionalizarlo y convertir a la música en lo que es: una industria", razonó Poluyan. ¿Se beneficiarán las bandas rosarinas y del resto del país con los objetivos que se propone dicha entidad a futuro? Todo parece indicar que sí.