Poeta, narrador, docente y colaborador en las contratapas de Rosario/12, Luciano Trangoni (Rosario, 1974) presentó el viernes en el Centro Cultural de la Cooperación un nuevo libro de poesía: El sanatorio de los hechiceros imaginarios. Publicado por Ciudad Gótica, el libro se divide en tres partes, cuyos poemas construyen un dispositivo narrativo en varios niveles de representación.

"Un libro donde los ricos personajes que lo habitan lo abren y lo cierran pero que, en su parte central, contiene otro libro: uno hecho de haikus2, comentó Norman Petrich. Y cada personaje, incluso el haijin o haishin (en japonés: autor de haikus, género de poesía breve en poemas de tres versos medidos) representa una manera distinta de encarnar el rol del artista, en tanto capaz de acceder al misterio.

El hechicero, el monje que se enclaustra, el yogui que medita en silencio o el cochero que se aparta del camino figuran al comienzo y al final, que contrastan con la serena zona central, donde "en la tarde gris/ lo que no se deja ver/ siempre estará". Un lóbrego sanatorio más bien parecido a una cárcel aloja al hechicero imaginario que deambula insomne por los pasillos y tiene un ominoso encuentro con Hécate. Esa deidad femenina multiforme fue en los himnos homéricos la única diosa que escuchó el grito de Coré al ser raptada por Hades, y la única que ayudó a su madre Démeter a buscarla.

Ese prisionero que se la encuentra en el fondo del infierno fue inventado, al igual que el monje y el yogui, por el cochero que se aparta del camino para poder escribir en la privacidad de una taberna.

Luciano Trangoni ha publicado, en poesía, La confusión de las lenguas (2012) y las novelas Los Zapatos de los Muertos (2006), Acá no hay dónde (2009) y el libro de cuentos 17 pesos y monedas (2010).