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Preanunciado como el encuentro en el que los representantes del gobierno provincial y de la Orquesta Sinfónica firmarían el acuerdo con el que se solucionarían los conflictos del organismo cultural, el de ayer por la tarde no fue más que un nuevo episodio de la problemática que cobró carácter público en el mes de septiembre. De hecho, el análisis realizado por las partes una vez culminado el diálogo lejos estuvo de las coincidencias.

Porque así como el ministro coordinador Rubén Michlig, responsable de conducir las negociaciones, calificó al encuentro como "muy positivo", el contrabajista Carlos Pagura (uno de los delegados de la Sinfónica) fue contundente al afirmar: "La Orquesta, en este tipo de situaciones, con los planteos que hacemos, no tiene margen de negociaciones. Estamos muy desmantelados y si no tenemos lo básico, que es lo que estamos pidiendo, no hay manera de acordar". Sin embargo, fue el Director de Cultura Jorge Llonch quien al cierre de esta edición --y casi en simultáneo con el concierto que la Orquesta ofrecía en el Monumento Nacional a la Bandera-- confirmó que hoy le acercarán al director Javier Logioia Orbe una propuesta corregida, en la que se estipulan plazos concretos para la creación de cargos y la resolución de algunos de los puntos planteados desde la Orquesta. "Creo que mañana (por hoy) se llegaría a un acuerdo definitivo", adelantó Llonch.

Prolongada durante algo más de una hora, llamativamente la reunión entre los representantes de la Sinfónica Provincial y los funcionarios del Gobierno de Santa Fe no contó con la presencia del secretario de Cultura Raúl Bertone. Y mientras las razones de esa ausencia no encontraron mayores análisis desde el ámbito gubernamental ("Desconozco la ausencia de Bertone. Yo vine por otras cuestiones a la delegación y había asumido el compromiso con la ministra de Educación que de ser necesario me sumaba a la charla", sintetizó Michlig), sí lograron repercutir en el ánimo bastante tenso de los músicos. "Bertone no existe", dispararon.

En esa misma línea crítica, una vez culminado el encuentro en la Sede de Gobernación el análisis de Pagura no fue del todo optimista: "Todavía no hay ninguna respuesta, se está reformulando la letra chica de cada pedido de los cargos, los plazos en que se entregarían los cargos. Lo real es que nosotros no tenemos mucho que discutir sobre qué plazos puede haber para un cargo. El cargo está o no está, si la Orquesta no tiene esos cargos no puede sonar. No es una cuestión que se pueda discutir para arrancar en junio. La gente quiere que arranquemos mañana mismo, porque todavía tenemos dos meses de programación. Y los técnicos del Gobierno están viendo ahora, a último momento, a las apuradas, si pueden lograrlo. Es por lo que estamos peleando y espero que realmente logren encontrar la manera de hacerlo. Lo que necesitamos son plazos concretos de solución. Promesas tenemos hace 22 años, y con las promesas llegamos a ser solamente 62 músicos. Necesitamos plazos y firmas de compromiso".

A modo de respuesta, hoy se llevará a cabo una nueva reunión, en la que, según confían desde la esfera gubernamental, se limarían definitivamente las diferencias a partir de la estipulación concreta de plazos para la solución de los distintos petitorios.