Las Audiencias Públicas de Agua son un Derecho ganado por los usuarios a pesar del profundo malestar que le provocó al ministro de Aguas Antonio Ciancio que el gobernador las haya confirmado. Se trata de un procedimiento de democracia participativa. Claro está que para que este instituto funcione deben existir dos requisitos, primero la voluntad de los ciudadanos en participar y segundo la voluntad de los tomadores de decisión de abrirse a la opinión de la comunidad. Esto último no le cae nada bien al ministro que repite una y otra vez antes de cada audiencia que "no son vinculantes".

Que un procedimiento no sea vinculante no es óbice para que el tomador de decisión no lo tenga en cuenta, salvo que a priori no quiera hacerlo. Uno de los objetivos de la audiencia pública es que quien va a decidir sobre un tema determinado, previamente tenga que escuchar y mirar a quienes van a ser afectados por dicha decisión. En esta oportunidad, el ministro no tuvo cara para defender su posición y prefirió mandar al Secretario de Aguas.

Desestimar la instancia porque va a haber opositores, ONGs que piensan distinto o vecinalistas que exponen sus problemas, no parece un punto de vista muy democrático. A esto el ministro le agrega el mote descalificador de "hacen política", con lo cual pareciera que él se dedica a otra cosa.

Las instancias de participación como las Audiencias Públicas no se hacen para informar lo ya decidido ni para permitir la catarsis del usuario sobre déficit del sistema, sino para interactuar, escucharse mutuamente y encontrar soluciones superadoras a las propuestas, que recojan parte de los argumentos de cada actor. Si el proceso no permite ganar en información, difusión y compromiso de los protagonistas con las posiciones del otro se transforma en un hecho vacío.

Las Audiencias Públicas de Saneamiento ya no son un hecho aislado sino un necesario proceso que comenzó en marzo del 2010, continuó en diciembre del 2011 y que terminan de realizarse en mayo del 2013. Los niveles de participación y la calidad de las exposiciones han ido mejorando en cada ciclo permitiendo comparar año a año la evolución del sistema ASSA.

La primera Audiencia Pública permitió abandonar la tarifa plana y avanzar hacia el sistema de bandas, más justo y equitativo, la segunda impuso la necesidad de avanzar hacia el servicio medido y la rehabilitación y mejoras de las instalaciones existentes, la tercera estuvo signada por el incumplimiento de este último objetivo y la caída de las inversiones producida en el año 2012 proyectada a la baja en el presupuesto 2013.

El tema de los medidores es el punto que grafica con mayor precisión la falta de respeto del ministro con respecto a las Audiencias Públicas. La discusión del aumento tarifario pedido por ASSA en noviembre de 2011, terminó con la resolución 092/11 del Ministerio de Aguas Servicios Públicos y Medio Ambiente (MASPyMA), en un aumento del 82 por ciento promedio.

Hubo muchos puntos en los que había divergencia, pero uno en el que todos sin excepción estábamos de acuerdo. Usuarios, Asociaciones, Colegios Profesionales, ASSA, el Ministerio de Aguas y el ENRESS, coincidimos en la necesidad de avanzar hacia el servicio medido. El ENRESS recogió este planteo en la resolución 816/11, exigiendo la colocación de 66.000 medidores en el plazo de dos años. La empresa debía colocar 20.000 medidores al 5° bimestre como forma de comprobar la voluntad de ASSA en cumplir la meta.

El Ministerio de Aguas Servicios Públicos y Medio Ambiente, toma sólo parcialmente la resolución del ENRESS, relativizando el compromiso de colocación de medidores. En la resolución, el compromiso taxativo es cambiado por la presentación de un plan a cargo de ASSA. La empresa presenta el plan el 22 de marzo del 2012, comprometiéndose a colocar 20.000 medidores antes de fin de año y 46.000 en el año 2013. En la práctica se auto﷓prorrogaba el plazo del 5° bimestre al 6° bimestre del 2012. Al 31 de diciembre del 2012, la empresa reconoce en su Informe Anual haber instalado por iniciativa propia (a cargo de la empresa) la cantidad de 5.753 medidores. No sólo no cumplió con la meta sino que bajo la performance del año anterior de 7.005 medidores.

Pero lo más llamativo es que el ministro dice a los medios de comunicación el día de inicio de las Audiencias Públicas, que "la medición no le cambia la vida a nadie y no es relevante", una verdadera provocación al sentido común. Por otra parte muestra palmariamente la hipocresía con que firmó la resolución del aumento anterior y su verdadera convicción. Desde el inicio no pensaba cumplir.

El ministro pone la frutilla del postre ese mismo día cuando conforma el Foro Intergubernamental Santafesino para el Uso Racional del Agua Potable con la presencia de las intendencias de Rosario, Santa Fe, San Lorenzo, Reconquista y Firmat. Como si no se tratara del mismo ministro que había hecho las declaraciones a la mañana, allí plantea la asignación de recursos para la instalación de 15.000 medidores en el sistema ASSA. Noticia que podría ser positiva si uno no conociera la historia anterior.