CORREO
Cada vez con más claridad se manifiestan las causas del desequilibrio ambiental, sequía, desertificación. El cambio climático llegó para quedarse, lo explican los meteorólogos y científicos de diversas disciplinas.
Desde por lo menos el siglo XV comenzó una devastación que no se detiene, cuando los españoles de la espada y la cruz llegaron a las costas de Abya Yala, a la que luego llamarían América, se inicio el etnocidio y también un ecocidio con impacto en ambas márgenes del Océano Atlántico.
En estas latitudes no hubo Revolución Industrial sino saqueo, expoliación. Esto aún continúa, pongamos por caso la provincia de San Juan transformada en queso gruyere por las empresas mineras, o bien la permanente aniquilación de los humedales como la que padecen las islas cercanas a Rosario.
No hay azares que provoquen la debacle en ciernes, las causas son notorias y se originan en el capitalismo, sistema económico y social que arrasa con la vida en todas sus expresiones, transformando en mercancía todo lo que encuentra a su paso. La resistencia conciente a este irracional ataque de exterminio planificado es un imperativo categórico que debemos asumir en el presente, sin dilaciones.
Carlos A. Solero
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux