Martes, 19 de mayo de 2009 | Hoy
El mes de Mayo, permite evocar a ciertas personalidades un tanto enturbiadas u ocultas por las brumas de la desmemoria cultivada por las clases dominantes.
Mariano Moreno, revolucionario y liberal, antiabsolutista, traductor y editor de una tirada popular del Contrato Social de Rousseau. Monteagudo que proclamaba: "Mártir o libre" y se enfrentaba a la vocación centralista y antifederalista de Pueyrredón el supremo Director de las Provincias Unidas. Hipólito Vieytes el conspirador de la jabonería emblemática de los carbonarios antimonárquicos, desterrado años después a los Pagos de Areco cuando el saavedrismo con el dean Funes a la cabeza habían desplazado a los jacobinos morenistas.
Todos los nombrados combatientes inclaudicables del Obispo Lué y del negrero esclavista José Martínez de Hoz, ambos sostenedores y votantes del Virrey Cisneros en el Cabildo Abierto del 22 de Mayo de 1810. Cuando Castelli denunciaba la temprana reacción vernácula.
Tiempos lejanos de fervores justicieros en los que ya eran evidentes los ocultamientos en las altas esferas, las medias verdades y las máscaras de los pactos inconfesables.
En estos nuestros tiempos, asistimos también a muestras de coraje popular, las madres que luchan contra los secuestros y la trata de niñasmujeres. Las madres coraje que enfrentan el dolor de perder sus hijos a manos de un sistema perverso de violencia mayúscula, los trabajadores que resisten desde su dignidad batalladora y los abyectos victimarios devenidos en víctimas: un sangriento general genocida diciéndose secuestrado y personajes imperturbables a los que se suelta la lengua para difamar sus sinrazones.
Con claridad lo enunciaba Tácito: "raros tiempos en los que se puede sentir lo que se quiere y decir lo que se siente."
Carlos A. Solero
miembro de APDH Rosario
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.