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Ningún castigo

El resultado de las primarias, indica que el objetivo de ayudar a la legitimidad de las candidaturas, es una explicación de laboratorio para justificar un resultado que en algunos casos responde a la propia incoherencia de esos candidatos y a la falta de propuestas y programas creíbles.

Altamira, que supo leer la realidad, planteó de cara a la gente la necesidad de abordar sus propias limitaciones y pidió con humildad que le ayuden a lograr el piso para seguir en octubre disputando el voto popular, teniendo pendiente armar una propuesta que justifique ese piso tan requerido y despierte la participación que reclama.

Fiscales de la corriente de Pino Solanas, que habían mutado sus adhesiones, se sumaron al control del acto electoral del Frente de Izquierda y Proyecto Sur, desperdició el aporte de la juventud imponiendo ﷓-como en Rosario-﷓ a dedo candidatos que no habían sido reconocidos o tenían aceptación en sus bases militantes, que como en el caso de Alcira Argumedo fueron insertados sin consenso.

Por otro lado, el supuesto castigo que las urnas le darían al PJ no fue tal y teniendo en cuenta que el domingo 14 no se elegían cargos, diluyó los argumentos de la dirigencia campestre y puso blanco sobre negro en las premoniciones de nuestra derecha vernácula que a la hora de salpicar de barro el proceso erró, en los métodos e incluso mostró con meridiana claridad la falta de referentes propios confiables y creíbles.

Es evidente que existe una fragmentación del campo popular y una ya constante falta de unidad de las fuerzas progresistas en torno a un programa de gobierno consensuado, las que terminan ﷓-como ayer-﷓ fagocitadas por la maquinaria mediática.

Este domingo le abrirá a la presidenta, una puerta que ni ella debe haber calculado, pero que deberá usarla con sumo cuidado si desea profundizar el modelo tal como anunciara reiteradamente, para que las asignaturas pendientes se vayan asimilando con la misma humildad que pregona y procurando desarticular las intenciones de la ávida derecha mediática para que en nuestros próximos años se consolide una democracia duradera, participativa, transparente y de compartidas aspiraciones de nuestra sociedad, que espera la justicia social que le prometieron, entre la que emerge como principal la postergada equidad distributiva y la lucha contra la corrupción.

Angel M. Contestí