CORREO
Manifestamos el repudio a la decisión de la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario de rechazar el recurso de apelación y el planteo de nulidad presentado por fiscalía y la querella, por su decisión anterior de apartar al juez Rodríguez por prejuzgamiento en la causa Brusa que investiga delitos de lesa humanidad cometidos durante la ultima dictadura militar en Santa Fe. Seguimos convencidos como hemos manifestado en otras oportunidades que estas decisiones de la Cámara son maniobras dilatorias que favorecen a los genocidas, que a 23 años de la vuelta a la democracia todavía no están condenados. A las autoridades que correspondan les decimos que no queremos caer en la trampa de los conjueces, ya hubo uno que a pesar de haber firmado una solicitada a favor de Videla y haber sido testigo de parte en un proceso seguido al ex juez federal Brusa, manifestó tener imparcialidad y hasta se dio el lujo de rechazar las recusaciones. Exigimos un juez imparcial y no los amigos de Brusa que figuran en la lista de conjueces del Juzgado Federal de Santa Fe. Exigimos juicio y castigo.
H.I.J.O.S.
Regional Santa Fe
Repudiamos la actitud de la justicia, que demoró hasta último momento el fallo a favor de que pudiera realizarse un aborto la joven discapacitada de 19 años que quedó embarazada producto de una violación. El mismo fallo de la Corte Suprema Bonaerense que autorizó el aborto dio los argumentos para no hacerlo, ya que dejó en los médicos la última palabra, quienes se negaron a practicarlo. Resulta indignante que siendo éste uno de los pocos casos de aborto no punible contemplados en el Código Penal, se haya llegado a esta situación. Más indignante aún es que los médicos utilicen como argumento la imposibilidad de realizar el aborto a esta joven por haber cumplido las 20 semanas de embarazo, siendo que hasta organizaciones internacionales como la OMS fijan la viabilidad del aborto hasta las 22 semanas completas de gestación. El gobernador Felipe Solá y el Ministro de Salud, Ginés González García, se pronunciaron a favor de la joven, pero ocultan que durante su gestión, miles de mujeres pobres siguen muriendo por las consecuencias de los abortos clandestinos y no han hecho nada para que eso cambie. Bajo el gobierno de Kirchner ya murieron más de 1200 mujeres por aborto clandestino. El caso de esta joven es una muestra más de que necesitamos poner en pie un gran movimiento de lucha, independiente de la Iglesia, el Estado, el gobierno y los partidos patronales, encabezado por las mujeres trabajadoras y de los sectores populares, para imponer el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. Porque no queremos más mujeres condenadas a embarazos forzosos y tampoco queremos ni una muerta más por abortos clandestinos.
Agrupación de mujeres
Pan y Rosas Rosario
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