Después de las 2.30 de ayer, un joven rompió la vidriera del bar Nino, ubicado en boulevard Oroño al 1100 y arrancó la caja registradora que se encontraba en una de las barras, tras lo cual huyó. De inmediato vecinos de la zona alertaron a la policía. Momentos después, cuando personal del Comando Radioeléctrico realizaba un rastrillaje, sorprendió al joven ladrón a pocas cuadras del bar, oculto en un contenedor de residuos, situado en Mendoza al 2100, y aferrando la caja registradora del bar asaltado. Los efectivos lo trasladaron a la comisaría 2a., donde quedó detenido.