Hoy a las 19:30, en el patio de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Rosario (Riobamba 250 bis), se presenta en la Facultad el Movimiento de usuarios/as y trabajadores/as en defensa de la Ley de Salud Mental 26.657. Con el objetivo de concientizar y ahondar el debate en torno al encierro, la estigmatización, el prejuicio y la lógica manicomial, la presentación consistirá en la proyección, seguida de debate, del largometraje de docuficción Oliveros, la película. Realizada en 2013 con dirección de Roberto Chanampa y guión de Hernán Camoletto, Oliveros es un proyecto audiovisual que surge del área cultural de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros (ver ficha completa en http://oliveroslapelicula.com.ar/).

Cruce entre ficción, teatro y documental, Oliveros, la película nació como un proyecto de inclusión social entre trabajadores y usuarios de la Colonia Psiquiátrica, y los vecinos de la Comuna de Oliveros: dos comunidades que antes de la película no tenían casi ninguna interacción mutua. Y se concretó con esfuerzo y creatividad, en una producción que testimonia cómo la expresión artística colectiva pudo tramar lazos impensados y comenzar a derribar prejuicios. Y también, desde la instancia de registro que la edición incluye, en un ida y vuelta con la ficción, se va bosquejando el film que no se pudo, el que sería posible en otras condiciones. La película es un emergente del proceso de construcción colectiva post 2000 que Fernando Ulloa llamó Experimento Oliveros, y que es un precursor del Movimiento.

Fundado el 28 de diciembre del año pasado, el Movimiento de usuarios/as y trabajadores/as en defensa de la Ley de Salud Mental y 26.657 eligió como disparador del debate esta obra que expresa los nuevos paradigmas que comienzan a emerger con la Ley de Salud Mental.

"Esta Ley, Nº 26657, que fue sancionada por unanimidad en el Congreso Nacional el 10 de diciembre de 2010, y reglamentada el 28 de mayo de 2013, ha sido producto de un proceso de construcción colectiva, interdisciplinaria, intersectorial e interjurisdiccional con una sostenida participación de usuarios, familiares, trabajadores de salud mental y organizaciones de la sociedad civil", se lee en un comunicado del 21 de diciembre de 2015 que, suscrito por casi 80 grupos e instituciones, fue la antesala de la creación del Movimiento, cuyos orígenes se enlazan a muchos antecedentes. Sustentada en el paradigma de los Derechos Humanos, la Ley 26.657 reconoce a la salud mental "como un proceso determinado por componentes históricos, socio-económicos, culturales, biológicos y psicológicos, cuya preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social vinculada a la concreción de los derechos humanos y sociales de toda persona".