OPINIóN
› Por Juan Carlos Sorbellini y Cristian Rossi *
Ante las declaraciones hechas a la prensa del represor Eduardo "Tucu" Constanzo, en las que en medio de una ordalía de palabras que son sólo un pálido reflejo de las atrocidades que llevaron a la práctica, aparece mencionado nuestro compañero Rubén Tito Messiez, secuestrado el 22 de agosto de 1977 y aún hoy desaparecido, éstas cínicas expresiones confirman en su horror lo acertado de las denuncias oportunamente realizadas por nuestro Partido, organismos de DDHH y familiares, respecto a la responsabilidad de los poderes regionales de la dictadura genocida en ese hecho que nunca hemos abandonado en la búsqueda de su total esclarecimiento.
Este drama se inscribe en la política sistemática impuesta por el poder de facto instalado en 1976 de eliminar toda resistencia social o política a sus planes reaccionarios de entrega y sumisión al imperialismo apelando a los más crueles métodos, como ya está demostrado en cantidad de casos y voces de "arrepentidos".
El asesinato del procesado represor Héctor Febres sumado a la desaparición de Jorge Julio López son un claro indicador de que las fuerzas represivas siguen activas y organizadas dentro y fuera de los aparatos de seguridad y FFAA e intentarán evitar toda declaración en juicio que involucre a culpables y demuestre la organicidad de los planes genocidas.
Es necesario que este abominable sujeto, cuyo desembuche se hace con el sólo efecto de salvar su despreciable pellejo, llegue en condiciones físicas y mentales aptas para declarar en juicio en la causa en la que está procesado. Las autoridades nacionales, provinciales, judiciales y policiales son absolutamente responsables de que así sea.
Exigimos que se proceda a llegar a fondo en la investigación que se desprende de esos dichos y se acuse, encarcele y procese a todos los nombrados, como así también se repudie el hecho que algunos de ellos estuvieron cumpliendo funciones oficiales en instituciones del Estado por mucho tiempo. Que se desvincule del juzgado al juez Sutter Schneider y se lo enjuicie porque sobran evidencias de sus vínculos con personajes de la dictadura y su deliberada falta de acción en los juicios como constan también en las declaraciones de Constanzo.
Que se profundice la investigación de todos los actos de lesa humanidad cometidos durante ese período y durante al actuación de las tres A como mínima reivindicación de los treinta mil que sufrieron en su cuerpo por oponerse a la entrega del patrimonio nacional, resistir al imperialismo y luchar por una sociedad más justa.
* Secretariado provincial del Partido Comunista de Santa Fe.
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