A quince días del asesinato de Silvia Suppo, seguimos acompañando el reclamo de sus hijos: "Verdad y Justicia. Esclarecimiento ya: ¿Robo o asesinato político?".

Sentimos un profundo dolor por la pérdida de esta compañera, cuya valentía y compromiso, junto con la de tanta/os determinaron la condena de algunos de los más reconocidos represores santafesinos en el primer juicio histórico por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura en nuestra provincia.

Nuestra preocupación es clara: ¿cómo seguir testimoniando, entregando nuestra voz y memoria después de esto?

En su discurso del pasado 24 de marzo, la vicegobernadora de la provincia, Griselda Tessio, aludió al planteo realizado por el teórico alemán Theodor W. Adorno hace más de 40 años: "¿Qué educación es posible después de Auschwitz?", parangonando ese pensamiento con aquello sobre lo que debemos reflexionar en la Argentina: "¿qué educación nos debemos después de la Escuela de Mecánica de la Armada (Esma)?".

El imperativo de que aquellos horrores no se repitan sólo puede lograrse a través de una educación crítica que nos permita conocer y reflexionar acerca de lo sucedido. Y para ello debemos contar. El relato, el testimonio de las víctimas juega un papel fundamental en ello. Es por esto que seguiremos contando, seguiremos hablando, seguiremos testimoniando. Para construir aquélla memoria colectiva que nos permita pensar en una sociedad donde aquéllas crueldades no se vuelvan a repetir.

Que quede claro que seguiremos haciéndolo, pero que necesitamos más que nunca el acompañamiento de la sociedad, de las instituciones, del gobierno. Se hace indispensable para la salud de la vida ciudadana el compromiso del Estado en investigar de manera profunda y amplia el crimen de Silvia Suppo. Hasta las últimas consecuencias. Este crimen, y además las amenazas, pintadas y volantes que no logran el objetivo de amedrentarnos, pero sí nos preocupa profundamente la escasa clarificación de los mismos.

Por Silvia Suppo, por sus hijos, por los nuestros, porque la sociedad en su conjunto se merece el esclarecimiento absoluto. Por el fortalecimiento de la democracia. Por nosotra/os.

(*) Querellantes en causas por delitos de humanidad en Santa Fe.