Manifestamos nuestro categórico desacuerdo con la decisión del gobernador Hermes Binner quien, acompañado por un grupo de senadores provinciales, ha decidido llevar adelante profundos cambios en el sistema electoral a pocos meses de la próxima elección y estando ya fijado el cronograma electoral. Consideramos este hecho como el más grave de los tres años del gobierno socialista, por el avasallamiento institucional que representa el cambiar las reglas de juego con el proceso electoral en marcha.

Este gobernador que recorrió la provincia haciendo campaña despotricando contra la "Ley de Lemas" y acusando de manipulación electoral a los gobiernos de turno, ahora con el apoyo de un grupo de senadores que han decidido ser sus socios minoritarios, se dispone a consumar uno de los hechos más escandalosos de la política santafesina de los últimos años, y que hace retroceder a la provincia a los tiempos en que las palabras "fraude electoral" eran moneda corriente.

Hoy, cuando vemos al paladín de la lucha contra la "Ley de Lemas" asociado con los senadores hablando de transparencia y mayor participación ciudadana, no podemos dejar de pensar que estamos ante una maniobra urdida pensando en intereses personales o sectoriales y no en beneficio de la calidad institucional, pretendiendo imponernos un sistema electoral violatorio de la Constitución, extemporáneo y cargado de dudas en cuanto a la posibilidad práctica de su aplicación.

La Ley de Boleta Unica tiene algunas características que van a provocar que el ciudadano extrañe la Ley de Lemas. Vamos a encontrarnos con un cuarto oscuro colmado de candidatos, no será una sino que serán cinco boletas, algunas de ellas de carácter kilométrico con decenas de candidatos cada una, donde para mucha gente será imposible encontrar el postulante elegido. Y lo que sin dudas es más grave, se vuelve a facilitar que aquellos "ricos y famosos", que no tienen compromisos partidarios ni ideológicos y por lo tanto nadie sabe muy bien que piensan, corran con ventajas, ya que para ser candidato no se necesita ajustarse a ningún tipo de disciplina partidaria, y solamente contar con una buena cantidad de recursos para la campaña electoral.

Tanto la ley mal llamada de "Boleta Unica", como el procedimiento de tratamiento del veto en sesiones extraordinarias, representan flagrantes violaciones constitucionales que abren la posibilidad para que cualquier ciudadano recurra a los estrados judiciales, presente un recurso prolongando así su aplicación y generando más incertidumbre en este curioso proceso electoral que tiene más de una decena de candidatos lanzados que no saben aún mediante qué métodos serán elegidos.

No queremos ser parte de este escándalo. Hemos resuelto no participar de las sesiones que con tanta premura han sido convocadas para que se termine aprobando un sistema electoral violatorio de la Constitución.

* Acompañan este texto, Marcelo Brignoni, Alberto Cejas, Martín Labbe, Enrique Marín, Ricardo Peirone, Gerardo Rico, Luis Rubeo, Claudia Saldaña, José Tessa y Oscar Urruty.