OPINIóN
› Por Sonia Tessa
El periodista Raúl "Bigote" Acosta se retractó ayer públicamente a las 10 de la mañana en LT3, en el programa Con todos. "No creí que fuese necesario retractarme de una broma, pero como fue tomada en serio, es muy necesario que yo me retracte de esa broma. En charla de mesa en el programa que conduzco, La mañana rosarina, hice una broma en referencia a las cosas que podía hacer una mujer genéricamente en la sociedad. Fue una broma, de las tantas bromas que uno hace. Nos reímos en la mesa", empezó su retractación el periodista, luego de que un comunicado de Mujeres Autoconvocadas Rosario y Cladem recibiera adhesiones de más de 50 organizaciones y personas. El comunicado exigía una retractación pública.
Que fue una broma no está tan claro al escuchar el audio original, y además toda la situación sirvió para poner en debate los límites del sentido del humor cuando se trata de violencia simbólica contra las mujeres. Hace muchos años, la periodista Moira Soto le respondió a un compañero de radio una supuesta broma con otra. El conductor del programa en el que participaba Moira se hizo el vivo diciendo que a las mujeres les gustaba que le pegaran. "Y a los judíos les gusta que los persigan", respondió, rápida, Moira. La respuesta fue el silencio. Después del holocausto, hay chistes que no están permitidos en el sentido común. Y la violencia contra las mujeres asesina a miles por año. Así como la sociedad tiene presente que hay ciertas cosas sobre las que por su gravedad no se pueden hacer chistes, es bueno que se entienda que la misoginia es violenta. La ley integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres sanciona la violencia mediática.
La retractación de Acosta fue con tono grave. "No fue tomado así (como una broma), y evidentemente tienen razón quienes no lo tomaron así porque aún en broma hay cosas que se escapan de ese juego y se convierten en antecedentes o en hechos, porque la palabra es un hecho, en hechos que invalidan tarea de muchos años de mucha gente que de modo valiente ha peleado por la igualdad de mujeres y hombres, por una igualdad ante la ley, por un respeto. A todo eso evidentemente y de modo absolutamente casual e inconsciente he atacado", dijo el Bigote. "Ahora, conscientemente, me retracto, no lo estoy haciendo ante nadie más que ante la memoria de todos los parientes muertos y torturados y de todos aquellos que como mi vieja, militante del gremio masitero y anarquista, en los 50 peleaba por estas cosas". "No lo haré más, señorita", dijo el conductor, otra vez con sorna.
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