Dom 27.08.2006
rosario

OPINIóN › PANORAMA POLITICO

No hay dos sin tres

› Por Pablo Feldman

El "Tercer hombre" apareció nomás y hay quienes sostiene que aparecerá un cuarto candidato. Desde las estructuras ya organizadas -las de Agustín Rossi y Rafael Bielsa- intentan degradar las nuevas alternativas con la remanida sentencia -no siempre errada- de "se largan para negociar". Seguramente uno y otro, estarían felices de contar como candidato a vicegobernador a Omar Perotti, pero no parece que esa sea la estrategia del intendente rafaelino, que oficializó su precandidatura ratificando un discurso que -en el caso de "bajarse" para ser el 2 de otro candidato- lo ubicaría en aquel territorio del que no se vuelve: el ridículo, tal cual lo definió hace más de medio siglo Juan Domingo Perón.

La irrupción de Perotti va más allá de sus chances de ser finalmente el candidato. Revela la insuficiente representatividad que parecen tener los dos candidatos "nacionales" pero sobre todo la inviabilidad del "consenso" del que habla Bielsa, más por necesidad que por convicciones, y del que tambien descree Rossi, estimando que es "la vía rápida" por la que transitan las chances del ex canciller. Rossi quiere internas porque presiente -y con razón- que si aparece el "dedazo" no se posará en su cabeza.

Precisamente por eso es que la aparición de un tercer candidato, y eventualmente un cuarto -del que se hablará más adelante- puede ser funcional a la estrategia de Rossi, que en definitva no es otra cosa que la democracia interna y la legitimación de las bases. Para Bielsa se trata de "una pérdida de tiempo". Resulta curioso -cuanto menos- hablar del tiempo que se pierde cuando faltan "dos octubres", como dijo el Presidente, y la movilización de las bases, lejos de conspirar contra las chances del PJ, obraría como precalentamiento para los comicios del 9 de setiembre.

Sin dudas la aparición de alguien que rompa el sistema binario Bielsa-Rossi tiene una explicación más compleja que la ambición de un dirigente político. Perotti encarna el discurso de buena parte del interior de la provincia que no se ve representado por las candidaturas lanzadas hace tiempo por los dos diputados nacionales. ¿Cómo saber si eso es así? La manera más sencilla parece a través de una interna. ¿Y si no hay interna? Al día de hoy, esa preferencia que ha expresado Néstor Kirchner es difícil de cristalizar porque ningún dirigente del PJ pasa la docena de puntos de intención de votos. "La única certeza que tiene Néstor es que el Lole es el único indiscutido del PJ santafesino", dijo a este cronista un funcionario que llama al jefe del Estado simplemente por su nombre.

En efecto, eso K se lo dijo a Rossi y no hizo falta que se lo repitiera a Bielsa, pero "Lole Gump" frenó su carrera antes de largar. Le dijo a Norberto Nicotra que le dijera a las autoridades del PJ, para que le dijeran a los afiliados que "no voy a ser candidato", pero nadie lo escucho de su boca. ¿Por qué no lo ha dicho el en persona, como hace dos años cuando no quiso se candidato a Presidente y lo repitió 43 veces? lanza la pregunta retórica el colaborador del Presidente, generando un clima que evidentemente envolvió al precandidato Bielsa, que ya salió a sentenciar "si Reutemann no nos miente..." y antes de terminar recibió la respuesta de varios escuderos del Lole que le dijeron desde "paracaidistas" hasta recordarle sus deseos de pasar sus días bajo la sombra de los castaños de los Campos Eliseos. Para reforzar (?) esa posición, repareció Juan Carlos Masson con la "Liga de Intendentes", un sello que el "Chueco" maneja con los parámetros del merchandising, y que hasta unos días exhibía en los locales del "Chivo" Rossi.

¿La "liga" representa a los referentes territoriales de la provinicia? Probablemente a algunos, pero no a todos, ni siquiera a la mayoría. En cambio, lo que alguna vez se llamó en esta misma columna el "reutemismo residual" parece tener una vela para cada santo. Y por esa razón es que -aun sin directivas concretas de su jefe- están reuniéndose sigilosamente para diseñar una estrategia común.

Al día de hoy, ninguno de los candidatos los representa. Desde ya que no es lo mismo Bielsa -con quien se han roto lanzas- que Perotti, pero ninguno de los tres es "del palo", entre otras cosas porque el Lole crecía solo, como una palmera a la que le sacaban los ramas laterales para que siguiera empinándose. Pero mas allá de esto, de la mecánica de la Fórmula Uno aplicada a la política -mecánicos desconocidos trabajando solo para el piloto-, lo que parece claro es que la escudería no parece dispuesta a trabajar para otro conductor, y que en todo caso preferiría probar con el muleto. El que aparece mejor perfilado es Edgardo Spinozzi, senador del departamento General López y uno de los hombres de más estrecha confianza del ex piloto de Fórmula Uno, que agrega a su bagaje político el ser reconocido en su territorio.

"Detras suyo, al menos se puede consolidar el proyecto provincial con la lista de diputados y senadores", dice un integrante del grupo que no descarta "conversar con Perotti y con Rossi". Lo cierto es que el "armado" de esas listas no está en consideración frente a la opinión pública y mucho menos en la Casa Rosada, donde lo único que interesa es saber quién va a enfrentar a Hermes Binner. Pero en las ciudades y pueblos del extenso territorio santafesinos, las preocupaciones y necesidades de los dirigentes son módicas; quieren saber qué pasará con ellos y con sus muncipios y comunas. Mas aun, muchos de ellos, alejados de las operaciones, desentendidos del "jet-set" provinciano y berreta de la política provincial, siguen esperando al Lole...

¿Qué pasaría si Spinozzi sale al ruedo, con el apoyo explícito del Lole? "Eso no va a pasar, el Lole no sale por nadie", contesta uno de sus colaboradores más cercanos. Pero no descarta que "midan" al candidato para ver si realmente ese sector que dominó al PJ -y a la provincia- durante más de una década, se siente representado.

Ya no son dos los que deben ponerse de acuerdo, ahora hay tres, y mañana podrían ser cuatro. "Cuanto más hayan, más difícil es el consenso, con que uno presente una lista hay que hace internas", especula el funcionario. Y es así, pero nadie se mueve hasta que no se mueva el Presidente. La duda es ¿se movera el Presidente? Hay quienes sostienen que ya "se está moviendo" y que el "no" que el Lole nunca pronunció públicamente, puede transformarse en otra cosa, por ahora en el rechazo a los "candidatos puestos a dedo" y más adelante quién sabe...

Ahora hay tres aspirantes y ningun candidato. Podría decirse que "hay tres balcones y ninguna flor..."

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