CIUDAD
Fue la semana pasada, organizado por el Area de la Diversidad
Sexual del municipio. Aseguran que, a falta de oportunidades,
la mayoría se dedica a la prostitución para vivir dignamente.
› Por Paula Kearney
La diversidad sexual sigue siendo poco tolerada por una sociedad que plantea como "normal" que haya hombres a los que les gustan las mujeres y mujeres a las que les gustan los hombres, dejando de lado a un amplio porcentaje de la población que elige otra orientación sexual. El problema que esto genera es que esa elección trunca otras elecciones, como por ejemplo el poder insertarse en el mercado laboral formal con los mismos derechos y obligaciones que el resto de los ciudadanos y ciudadanas.
Frente a esta situación, el Area de Diversidad Sexual de la Secretaría de Promoción Social municipal realizó la semana pasada un encuentro del que participaron profesionales, organizaciones sociales y miembros de la comunidad gay, lésbica, bisexual, travesti y transexual, para debatir sobre esta problemática y comenzar a delinear políticas de acción orientadas a lograr una inserción laboral formal de las travestis y transexuales, que en el 80 por ciento de los casos terminan ejerciendo la prostitución para poder vivir dignamente.
¿Por qué específicamente travestis y transexuales? Porque "dentro del colectivo de lesbianas, gays, bisexuales, travestis y transexuales, el segmento más discriminado, más estigmatizado, más excluido, es el de las travestis y transexuales, porque de alguna forma son la cara visible de la diversidad sexual, son las que portan en su cuerpo la diversidad sexual", explicó el titular del Area, Esteban Paulón, para después agregar: "Gays y lesbianas no dejan de ser varones y mujeres, entonces en esta sociedad en la que se tiene que ser varón o mujer, nosotros -al menos en la cuestión corporal- respondemos en cierta medida a un estereotipo femenino o masculino. Las travestis y transexuales no responden a un estereotipo, justamente construyen una identidad por fuera de esos estereotipos, y eso genera discriminación y exclusión en todos los ámbitos".
Así, "pensar en travestis y transexuales incluidas en espacios de ciudadanía se hace muy difícil", remarcó Paulón, y explicó que en el ámbito laboral, la discriminación se hace más fuerte, dejando como única posibilidad el trabajo sexual, que "no es una verdadera opción, es un lugar que como sociedad les asignamos".
Pero esta exclusión no sólo se origina en una discriminación cotidiana como puede ser que alguien deje de ir a comprar a un comercio si éste es atendido por una travesti, sino que el mismo Estado las discrimina al no poder registrarlas en el Anses, porque "si yo soy Mariana, pero tengo el DNI con un nombre que me fue impuesto al nacer y que no responde a mi sentir de género, ¿adónde estoy? ¿tengo aportes, no tengo aportes? ¿voy a poder jubilarme? ¿la seguridad social me va a cubrir? ¿la obra social va a responder por mi?", se preguntó Paulón.
"El trabajo en nuestra sociedad -aseveró- es un poco lo que mide nuestra inclusión social, entonces hay un montón de factores que van desde la identidad, la educación y la capacitación, hasta la discriminación abierta, que implica el no poder acceder a un espacio de trabajo que hace que sea ínfimo el número de chicas que están trabajando formalmente. La mayoría, por esta situación, están confinadas a la situación de prostitución y a todos los peligros que eso conlleva".
Dentro del Area de Diversidad Sexual estiman que un 80 por ciento de las travestis y transexuales están en situación de prostitución, lo que implica que hay un 20 por ciento que no. "Eso es un poco lo que nos movió a generar este encuentro", apuntó Paulón, e informó que de las consultas que reciben "es creciente el número de chicas que manifiestan querer dejar el trabajo sexual", mientras que conocen algunos casos de "chicas que están en pareja y conformando grupos familiares sin una necesidad económica porque su pareja puede solventar los gastos del hogar, pero con ganas de trabajar y sin poder hacerlo. Es decir, distintas situaciones, pero todas conducen a que la mayoría de las chicas, de tener opciones de incluirse laboralmente en otros espacios lo harían sin dudarlo. Inclusive teniendo un menor ingreso, pero estando incluidas en un circuito social que las haga sentir parte integrada de la sociedad".
Dentro de los casos que desde el Area tienen conocimiento de travestis incluidas en el sistema laboral formal, "son chicas travestis que comenzaron a expresar su identidad de género ya habiendo ingresado al sistema laboral formal", apuntó Paulón.
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