Una importante cantidad de vecinos del asentamiento La Cariñosa, ubicado en la zona de bulevar Avellaneda y Uriburu, cortaron ayer esas arterias en reclamo de una respuesta de parte del municipio o la provincia ante el intento de desalojo del predio que ocupan. "Tuvimos que ponernos delante de las topadoras porque vinieron dispuestos a tirar abajo las casas", aseguró María Fernández, una de las vecinas que en medio de la conmoción logró explicar que "los que vinieron a desalojar son de una empresa que le compró los terrenos a la fábrica Minetti". Se trata de la firma Juan F. Secco dedicada entre otros rubros a la fabricación de generadores eléctricos.

El predio en cuestión, de unas cuatro manzanas de extensión, fue ocupado hace diez años por algunas familias humildes de la zona que fueron levantando sus viviendas. Con el tiempo, se sumaron cada vez más personas, llegando en la actualidad a albergar a 200 familias.

El delegado de la CTA Luis Castañeira confirmó que "hay una empresa que se dedica a la construcción de generadores eléctricos que dice haber comprado los terrenos y hace unos días vinieron con las topadoras, sin ninguna orden judicial, diciendo que la gente debía desalojar los terrenos.

Castañiera relató que "el desalojo comenzó ayer gente con maquinarias viales de la empresa Juan F. Secco junto a policías de la seccional 18º, que le dijeron a la gente que los terrenos eran de esa empresa". Según el dirigente entre los titulares de la firma estaría Alberto Kohan, ex secretario general de la presidencia de Carlos Menem.

La empresa estaba radicada en Granadero Baigorria,"pero se instaló el año pasado en el predio de Uriburu y avenida de Circunvalación donde fabrica generadores eléctricos". Justamente el predio comprado ahora es el del sector posterior de la planta donde había quintas, cuyos dueños se convivían con los vecinos del asentamiento son problemas".

"Nosotros pretendemos que la Municipalidad o la provincia dé una respuesta al respecto. No es que la gente se oponga al desalojo si es que hay nuevos dueños. Lo que pretenden es que les otorguen un lugar donde ir a vivir". El dirigente agregó que "son unas 200 familias que ocupan unas 4 manzanas. Ahora no están las topadoras ni la policía. Pero si ya vinieron seguramente lo harán otra vez. Por eso la gente no se va a mover de este lugar hasta que desde el municipio o la provincia se dé una respuesta a sus reclamos".

Ayer los vecinos cortaron Uriburu y Avellaneda, entre las 9 y las 18

exigiendo la presencia de funcionarios provinciales o municipalidad para que interceda entre la empresa y los vecinos, al mismo tiempo los vecinos hicieron una asamblea y decidieron que ellos no tienen inconvenientes en retirarse siempre y cuando se les asigne un lugar donde instalarse.