Luego de que el concejal del Frente Progresista, Juan Rivero, confirmara su abstención al proyecto que tratará el aumento del boleto, tal como lo adelantara Rosario/12 en su edición del domingo pasado; el concejal radical Jorge Boasso explicó ayer que el cuerpo debe otorgar un permiso previo para la abstención; y además, debe ser justificable por cuestiones de conciencia o religión. El oficialismo, a través del titular del bloque; Manuel Sciutto, entiende que -como ha ocurrido en otras oportunidades-, el cuerpo debe aprobar el pedido de abstención de Rivero; postura que respetarán "plenamente", aunque aclaró que no la "comparte, porque hubiera sido positivo su acompañamiento".

Los concejales opositores le agregaron ayer una cuota de suspenso al tratamiento del proyecto de ordenanza del Ejecutivo, que pretende llevar el boleto a 1,60 pesos. Enterados de la postura del concejal Juan Rivero, quien adelantó que en la próxima sesión del 31 de julio dará quórum para tratar el tema, pero a la hora de votar se abstendrá; advirtieron sobre algunas cuestiones reglamentarias.

"Los concejales no podemos abstenernos si no nos autoriza el cuerpo", sostuvo el concejal radical Jorge Boasso. En declaraciones periodísticas, el edil explicó que en el caso de Rivero "no corresponde una abstención ni tampoco hay justificativos porque no existen razones de conciencia ni de religión que influyan en su decisión".

"Si la mayoría socialista se lo permite, Rivero se abstendrá pero adelanto que buena parte de los concejales vamos a negarle la abstención -amenazó Boasso-. Tengo la certeza de que Rivero no quiere el aumento pero lo están obligando a ir a la sesión porque su presencia da quórum y él sabe que eso implica el aumento del precio del boleto".

En la misma sintonía, el concejal del Frente para la Victoria, Osvaldo Miatello, señaló que no cree que sea un tema para abstenerse. "Se vota a favor o en contra porque no hay una cuestión de conciencia. Lo que plantea Boasso es un mecanismo formal; me parece que hay que votarlo, el concejal debe decidirse por sí o por no, no abstenerse", consideró el vicepresidente primero del cuerpo.

En cambio, para el jefe de los oficialistas, lo que corresponde reglamentariamente es que "el cuerpo apruebe el pedido de abstención de Rivero si lo solicita el día de la sesión". Sin embargo, explicó que es facultad del Concejo. "No lo tiene que autorizar nuestro bloque", indicó.

Sciutto reconoció que no comparte la posición del concejal Rivero. "Hubiera sido positivo que el acompañara nuestro planteo, pero lo respetamos. Si pide la abstención; entre otras cosas porque ha estado más de una semana aislado del tema, haciendo reposo, creo que está bien y que es una forma de llamar la atención sobre algo que le preocupa. Lo que no corresponde es que nosotros avancemos sobre la decisión de los demás concejales, porque Boasso sabe lo que vota él y quiere define lo que debe votar Rivero", precisó.

A causa de una neumonía -acompañada de un pico de presión-, Rivero no concurrió a la sesión extraordinaria solicitada por el intendente Miguel Lifschitz para que el cuerpo trate el aumento de la tarifa del Transporte Urbano de Pasajeros. De todas maneras, el concejal del Frente Grande; que integra el bloque oficialista cuyo número de concejales le alcanza para conformar una mayoría automática, había adelantado que no iba a votar el proyecto por su compromiso con los habitantes de los barrios más humildes de la ciudad.

Allegados a Rivero, que ayer realizó una visita oficial al predio de la Ex Fábrica Militar, lugar donde estuvo detenido a mediados de 1978 (ver aparte); sostuvieron a este diario que en relación al tema de su abstención, el edil no iba a realizar más declaraciones; luego de la conferencia de prensa que brindó el pasado lunes luego de su ausencia por motivos de salud.