Los docentes de la UTN seccional Rosario decidirán mañana en una asamblea la continuidad de la medida de fuerza -que cumple hoy 25 días- en reclamo de salarios adeudados, y la regularización de la situación de numerosos docentes convertidos a becarios. Si bien el decano Rubén Ciccarelli prometió que hoy estaría el dinero acreditado, la asamblea docente de anteayer decidió pasar a un cuarto intermedio, hasta ver cristalizada la solución. "A pesar del compromiso del decano, no está toda la documentación. A esta altura del conflicto, los docentes afectados no quieren levantar el paro si no se aseguran el cumplimiento", indicó Horacio Valentini, presidente de la Seccional Rosario de la Asociación Gremial de Docentes de la Universidad Tecnológica Nacional (FAGDUT).

Rosario/12 intentó infructuosamente ubicar al decano de la Regional Rosario, Rubén Ciccarelli y al rector de la UTN, Héctor Brotto, pero no obtuvo respuestas a la consulta periodística sobre la grave situación que atraviesa la sede local de la UTN.

Luego de considerar incompleta e insuficiente la documentación entregada por el decano, los docentes afectados le comunicaron que para destrabar el conflicto debía comprometerse por escrito, con un aval, a pagar y regularizar la situación de más de un centenar de docentes.

El decano remitió el compromiso escrito de trabajar hasta normalizar las liquidaciones correspondientes a los docentes con inconvenientes. Por este motivo, Ciccarelli viajó a Buenos Aires, donde tramitaba en Rectorado la información solicitada por los docentes en la asamblea del lunes.

Según Valentini, hoy debería estar el dinero en los cajeros. "Vamos a tratar de fijar una fecha para el pago de lo que quede pendiente. De esa manera, la asamblea contaría con toda la información necesaria para decidir", consideró el dirigente, quien advirtió que ante nuevos incumplimientos, "el tema volverá a ponerse complicado".

Los docentes también reclaman que el decano remita la ejecución del presupuesto 2008, el balance y demás estados contables al día, adjuntando las planillas de liquidación de salarios y becas, donde se pueda individualizar los gastos incurridos para cada agente.

En este sentido, Valentini manifestó que la documentación, que el decano aún no entregó, también fue solicitada al Rectorado, para que aporten lo que ellos tienen. "Veremos cómo siguen los reclamos una vez que los docentes solucionen sus problemas. Después queda pendiente el tema de la transparencia en los manejos de la facultad. A raíz de lo que se descubrió es necesario cambiar el rumbo", alertó Valentini.

El conflicto se originó en junio, cuando a numerosos docentes se les modificó la situación de revista, sin previo aviso, convirtiéndoles sus cargos docentes a becas. Simultáneamente, un grupo importante de docentes que habían sido designados, y cumplieron tareas docentes a partir de abril, se encontraron con la sorpresa de que no les pagarían sus salarios.