Una beba de sólo nueve meses recibió una dura golpiza, lo que le generó traumatismo de cráneo, fractura en el parietal, hematomas, excoriaciones en el muslo derecho y pérdida de conocimiento. La pequeña, oriunda de Villa Gobernador Gálvez, fue trasladada al Hospital de Niños Víctor J. Vilela donde permanece internada y evoluciona favorablemente. La policía detuvo a su padrastro sospechado de ser el agresor. Desde el centro asistencial destacaron que no se trata de un hecho aislado: mensualmente se denuncian entre 14 y 16 casos, casi el doble de lo registrado años atrás. "Hay más casos de maltrato infantil pero a la vez hay más denuncias. Antes muchos casos no trascendían, no se denunciaban, ahora hay más conciencia y sensbilización", explicó la responsable del Grupo de Atención al Maltrato Infantil del Vilela, Alicia Giménez.

El hecho en cuestión se registró durante el fin de semana pasado, cuando una joven de 20 años, Olga Gallegos trasladó al Hospital Gamen de Gálvez a su hija María, de 9 meses, con numerosos golpes y lesiones, al parecer producto de una agresión efectuada por parte de su pareja.

Por la gravedad del cuadro clínico, la menor fue trasladada al Hospital Vilela de Rosario. Al llegar la pequeña presentaba un severo traumatismo de cráneo, con pérdida de conocimiento a raíz de los golpes en su cabeza, fractura en el parietal, hematomas y excoriaciones en el muslo derecho.

En la investigación intervino la seccional 29ª. Agentes de esa dependencia detuvieron a un joven de 23 años que estaría implicado directamente con la agresión y sería el padrastro de María.

Al cierre de esta edición, la menor evolucionaba favorablemente en una sala normal y se encontraba fuera de peligro. "El cuadro con el que ingresó era realmente delicado", reconoció Alicia Giménez a Rosario/12 para luego destacar que el caso "lejos está de ser un hecho aislado. En los últimos años se incrementó notablemente la cantidad de casos de maltrato infantil y fundamentalmente las denuncias".

En ese sentido la responsable del Grupo de Atención al Maltrato Infantil del Vilela indicó que en la actualidad se recepcionan en ese centro asistencial entre 14 y 16 denuncias. "Antes no superaba los ocho casos por mes", admitió Giménez. Al momento de mencionar razones que expliquen el incremento de casos y denuncias, la facultativa sostuvo: "Evidentemente incide la realidad social tan compleja y la mayor concientización de parte de la población respecto a la importancia de denunciar este tipo de actos que antes quedaban en la esfera privada".

Giménez destacó que los profesionales del Vilela recepcionan frecuentemente denuncias no sólo de familiares directos del agredido sino también de terceros: maestros, directores de escuelas, vecinos; todos preocupados por la reiteración de casos de violencia.

Pese al aumento de las denuncias, Giménez no dudó en afirmar que todavía "quedan muchos casos sin denunciar. Hay mujeres que se paralizan ante la violencia, no saben cómo actuar, tienen temor de pedir ayuda ante la posibilidad de que el agresor tome represalias".

"Por eso pensamos -continuó Giménez- que la difusión de los hechos, el testimonio de profesionales que dan contención a las víctimas a través de los medios es fundamental para que las víctimas de casos de violencia familiar se animen a denunciar a los agresores ante personas que conocen la problemática y con seguridad le van a dar una mano".