Luego de una audiencia a la que fueron convocados representantes del grupo JBS, propietario del frigorífico Swift, y del sindicato de la carne, el Ministerio de Trabajo provincial dictó ayer la conciliación obligatoria por los despidos en la planta de Villa Gobernador Gálvez. La medida rige por 10 días hábiles y contempla el regreso de los operarios cesanteados al frigorífico, aunque podrán optar por cobrar la indemnización. Ahora, la empresa deberá alcanzar el listado de las personas que recibieron el telegrama, y se fijó una audiencia para el próximo jueves 17 de marzo.

En diálogo con Rosario/12, el director provincial del Ministerio, Mario Gaggioli, confirmó el dictado de la conciliación y aseguró que desde la empresa "no iban a despedir a nadie más, y que tenían en vista un proceso de inversión para una planta de desposte, ya que toda la producción del frigorífico es para exportación".

Luego del acta firmada ayer, la cartera laboral provincial, que hasta la reunión había actuado de oficio, decidió involucrarse de lleno en el conflicto dictando la conciliación obligatoria hasta el 16 de marzo. Según trascendió, se les pidió a la empresa un listado del personal despedido con una descripción del sector donde trabajaba, la edad y la antigüedad de los 85 trabajadores despedidos que de todos modos podrán cobrar la indemnización.

Participaron del encuentro en la sede de Ovidio Lagos y San Lorenzo, además de Gaggioli, la viceministra Nora Ramírez, el delegado del Ministerio de Trabajo de la Nación, Rubén Ferreyra, el presidente de JBS, Artemio Listoni, que una vez que se logró el acuerdo se retiró del lugar, la mayoría de los dirigentes del sindicato de la Carne, entre ellos el tesorero Alberto Ramírez y dirigentes de Astadyc, el gremio que nuclea al personal jerárquico, administrativo y vigiladores.

"Hasta las 10 de la mañana no existía ninguna denuncia formal, nos enteramos por los medios", señaló Gaggioli, que luego convocó a las partes en la dirección provincial. "Lo primero que hice fue pedirles que me clarificaran la situación. Me dijeron que habían despedido a 85 personas, aunque plantearon que no era una situación de crisis", agregó el funcionario.

Antes de la reunión, y según pudo averiguar este diario, el gobierno nacional estaba dispuesto a aplicar el decreto 328/88 que indica que los empleadores, antes de disponer despidos deben comunicar tal decisión al Ministerio de Trabajo con una anticipación "no menor de 10 días de hacerla efectiva".