El intendente Miguel Lifschitz cargó ayer duramente contra la Corriente Clasista y Combativa (CCC) tras los incidentes del lunes en la sede local del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. "Es lamentable que se ejerza violencia, que se intente ocupar un edificio por la violencia", señaló Lifschitz, para luego agregar que "muchas organizaciones sociales en la ciudad, algunas con mucha inserción, no recurren a esta metodología". Como consecuencia de los enfrentamientos entre la policía y un grupo de militantes de la organización social, que reclamaban respuestas por parte del funcionario a cargo de la delegación, varias personas sufrieron heridas de distinta consideración, mientras que el frente vidriado de la repartición quedó totalmente destrozado. En este marco, y en base al informe policial, se abrió una causa en el juzgado de Instrucción Nº 5 a cargo de María Luisa Pérez Vara, en el que figuran como implicados cuatro militantes de la CCC; entre ellos el referente de la organización, Eduardo Delmonte, quien reconoció que los hechos de violencia "no son buenos para nadie".

Lifschitz planteó en declaraciones radiales que en Rosario hay "más de 15 organizaciones sociales, algunas con mucha inserción, que no recurren a esta metodología. También trabajan con sectores carenciados y con cooperativas de empleo, con emprendimientos comunitarios, que están en contacto con el municipio y que no recurren a la presión permanente y de incitar a la ocupación del espacio público".

Según el intendente, "los argentinos tenemos que abandonar esta metodología, hay herramientas para resolver situaciones puntuales. Un municipio como Rosario o el gobierno de la provincia, e incluso los propios organismos que tienen vocación de diálogo permanente, tienen las puertas abiertas, se atienden los reclamos, las demandas, las necesidades".

"No es necesario recurrir a estas metodologías, que no son compatibles con una convivencia civilizada en la ciudad, y más cuando funcionan todos los espacios de la democracia y la Justicia donde el ciudadano puede hacer los reclamos que considere adecuado", sostuvo el titular del Palacio de los Leones. "Si lo que nos interesa es mejorar la situación de barrio humildes y de familias carenciadas hay herramientas para hacerlo, encarando proyectos en conjunto de mejoramiento barrial", agregó Lifschitz.

Teniendo en cuenta que varios uniformados debieron ser internados por diferentes lesiones -todos ya fueron dados de alta-, y por los daños que se produjeron en la zona, la policía elevó un informe a la División Judiciales. El parte del procedimiento, que incluye las testimoniales de los efectivos, recayó en el juzgado de Instrucción Nº 5 a cargo de la jueza María Luisa Pérez Vara.

Según indicaron a este diario fuentes policiales, cinco integrantes de la CCC quedaron implicados en la causa porque fueron los que "dieron la orden de tomar el edificio", entre ellos Delmonte. En diálogo con Rosario/12, el referente de la CCC dijo que la policía tuvo "una actitud provocativa", y los denunció por haber disparado al aire con una pistola 9 milímetros, mostrando como prueba una vaina encontrada en el suelo. "No me consta, no voy a dar crédito a eso", le respondió el titular de la URII, Cristian Sola.

En relación a las críticas de Lifschitz, el dirigente social consideró que "no ayudan, en vez de abordar el problema no ven que en realidad somos voceros de una situación". Además, consideró que el resto de las organizaciones sociales de la ciudad, a las que el intendente diferenció de la CCC por la metodología del reclamo, los toman a ellos "como referencia, por lo cual cada cosa que vamos logrando con la lucha, en menor medida se ven obligados a otorgárselo a los otros".

Delmonte adelantó que iniciaron contactos informales con el Arzobispado de Rosario para incluirlos como mediadores en una futura mesa de negociación; un recurso utilizado por la CCC cuando hace cuatro años protagonizaron una larga protesta en la Plaza San Martín. Por ahora, no van a levantar el acampe que desde hace una semana mantienen en la Plaza Pringles.