La polémica la reavivó la Asociación de Transportistas Escolares ayer, cuando su titular, Sel Ruiz Brisuela reclamó que se pongan en marcha las "fotodenuncias" similares a las de la ciudad de Buenos Aires, para cinco incumplimientos de tránsito. La idea de los empresarios es desalentar a los que estacionan en la puerta de las escuelas, sin respetar los lugares, en doble y hasta triple fila. Rápido de reflejos, el concejal radical Jorge Boasso presentó un proyecto para que esa posibilidad se extienda a toda la ciudad y no sólo al frente de las escuelas. En ese contexto, el director de Tránsito de la Municipalidad, Henry Fabbro, planteó que "cualquier nueva medida (para evitar doble fila y mal estacionamiento) deberá definirse en el Concejo Municipal", aunque prefirió no opinar sobre la propuesta del edil hasta "estudiarla". El funcionario recordó que el municipio hizo campañas a principio de año para evitar la doble fila, y que "hay inspectores controlando".

Ruiz Brisuela disintió con Fabbro y reclamó "nuevas medidas" al municipio. En ese sentido, aseguró que "todo" lo que se ha hecho para terminar con el caos vehicular en la puerta de las escuelas son "medidas chatas", y apuntó a que las campañas son "simples intentos vanos", porque "en menos de un mes, todo sigue igual".

La representante del sector aseguró que la organización presentó un proyecto en el Concejo Municipal, el año pasado, para que las cuadras del frente de las escuelas queden despejadas de autos, y sólo ingresen a estacionar los transportes, en los horarios de entrada y salida. Esa idea la motorizó en noviembre del año pasado el entonces titular de Tránsito Municipal, Mauricio Malano, aunque nunca pudo realizarse ante las quejas de varios sectores, entre ellos los comerciantes. El tema nunca se debatió en el Concejo.

Esta semana los más de 350 transportistas escolares de la ciudad, que trasladan a más de 14 mil niños entre sus hogares y las escuelas hicieron sentir su "cansancio". Propusieron que los vecinos se transformen en inspectores voluntarios para denunciar infractores que estacionan en doble fila o en el espacio reservado para los transportes, y ocasionan importantes problemas al tránsito. "No se trata solo de tocar bocina. Mucha gente nos dice que no ve el problema porque no hay muchos accidentes de chicos en esos horarios, pero nosotros les contestamos que esas cosas no pasan porque los que trabajamos en esto hacemos un esfuerzo sobrehumano; pero así y todo, nos chocan los vehículos y a muchos chicos los autos que están mal estacionados les han pisado los pies. No es fácil cuidar a todos los nenes que cargamos", aseguró Ruiz Brisuela.

Después de escuchar la queja de los transportistas escolares, Boasso presentó una iniciativa para crear la figura del "fiscalizador ciudadano", que permitiría a los vecinos presentar denuncias adjuntando pruebas tales como fotografías o videos tomadas desde sus teléfonos móviles, y que esa medida tenga implementación en toda la ciudad. "Al detectar infracciones, por ejemplo autos mal estacionados o locales que no cumplen con la normativa vigente, los vecinos podrán denunciarlas presentando pruebas, como fotografías o videos tomados desde su teléfono celular. Dicha denuncia seguirá un trámite administrativo pudiendo revestir la misma importancia que un acta labrada por un inspector municipal. El proyecto de ordenanza asegura la confidencialidad de los datos del denunciante, protegiendo esta información ante terceros, incluso ante los mismos autores de las supuestas infracciones", dijo.

Fabbro se excusó de emitir opinión sin "estudiar" la idea del edil. Al mismo tiempo, aseguró que cualquier medida que se tome, deberá ser definida en el Concejo. También aseguró que durante el día hay 200 inspectores en la calle que "se organizan para controlar".