"Siempre estuvimos en el mismo lugar". Encendido, de cara al Monumento a la Bandera, el presidente del bloque de diputados nacionales del Frente Para la Victoria, Agustín Rossi, encabezó su propio festejo. Lo acompañaron agrupaciones afines como el Movimiento Evita y la Martín Fierro. Horas antes, se acercó al Club Nueva Era, en la zona oeste de la ciudad, para celebrar de manera más medida con la lista que condujo Omar Perotti. "Es merecido este triunfo, por todo lo que ha puesto la presidena Cristina Fernández de Kirchner, por la energía que siempre tuvo aún en los momentos más difíciles, por la tranquilidad que mantuvo durante todos estos años, por la claridad ideológica de marcar el rumbo en los momentos difíciles", evaluó Rossi en diálogo con Rosario/12.

Los diputados nacionales electos Perotti, Marcos Cleri y Silvia Simoncini se pusieron al frente de la conferencia de prensa que se realizó en el club de Mendoza y Provincias Unidas. Junto a ellos se sentó María Eugenia Bielsa. A un costado se ubicó Rossi. Se preparaba para celebrar como deseaba, cerca del río Paraná. Instalar el búnker en Nueva Era, al igual que en las PASO, fue decisión de Cleri, líder de La Cámpora Rosario. Nació en ese barrio y se siente cómodo en el reducto de las cuatro plazas. Preparó una sala vip, recibió las planillas de los fiscales y armó un acto. Rossi saludó, se quedó unas horas y viajó hacia el Monumento.

El Chivo vivió de cerca la etapa más dura de Cristina Fernández. Tiempos del duro debate de la 125 y la muerte del ex presidente, su compañero de toda la vida. "Me da una gran alegría en lo personal. He estado muy cerca en los momentos más difíciles y ha logrado sobreponerse a desafíos importantes que ha tenido", recordó el ex candidato a gobernador. En ese sentido, no quiso perder de vista que "desde la recuperación de la democracia, Fernández es la presidenta más votada, con la mayor cantidad de votos en la historia con respecto al segundo". Para Rossi, esos porcentajes "muestran que ésta es una elección increíble en toda la provincia", donde el Frente para la Victoria aventajó por dos puntos a la lista del Frente Amplio Progresista encabezada por Hermes Binner.

En el Monumento lo aguardaban casi dos mil personas. Leales a Cristina y a él, que lo recibieron con un atronador "Chivo conducción". Lejos de la calma con la que habló en Nueva Era, allí se mostró más cómodo. Les hablaba a los que, como él, levantaron la bandera del kirchnerismo cuando esa fuerza política no llegaba al diez por ciento de los votos en la provincia. Cuando notó que la Presidenta iba a pronunciar un discurso, pidió silencio para que entre todos la escuchen desde una pantalla colocada en el escenario. Militantes con dificultad para contener las lágrimas se regocijaban con las palabras de Cristina. Rossi la escuchó abrazado a su familia. La aplaudieron, la acompañaron con cánticos y chiflaron a Hermes Binner cuando Fernández le agradeció al gobernador que la haya llamado para felicitarla.

Atento a la nueva etapa que se abre para el peronismo santafesino, Rossi recordó que "la Presidenta ha convocado a todos". El futuro del justicialismo en la provincia "dependerá de la inteligencia, de la generosidad, de la capacidad de administrar las diferencias, las distintas expectativas, de la razonablidad".

"El peronismo de Santa Fe es un peronismo que no tiene liderazgos exclusivos y que tampoco tendría que tener liderazgos que excluyan a nadie. Tiene que ser un peronismo en donde la construcción colectiva prevalezca sobre las individualidades, y ahí va a estar puesto mi esfuerzo", anunció Rossi. Varias corrientes se abrirán en el peronismo provincial tras los resultados electorales de este año, tanto a nivel provincial como nacional.

"Tenemos una enorme oportunidad de construir una fuerza política que tenga la expectativa de dentro de cuatro años poder gobernar la provincia ¿A quién le toca, de quién es la responsabilidad?, me parece que falta mucho y me parece que tenemos todo un tránsito", concluyó Rossi.