El intendente Miguel Lifschitz defendió ayer la propuesta del municipio tendiente a prorrogar por dos años la ordenanza que permitió el ingreso de los autos particulares al microcentro. "Los índices ambientales en la zona no han empeorado y siguen por debajo de los niveles máximos permitidos. La liberación al tránsito, según los comerciantes de esas cuadras les permitió incrementar sus ventas. Por eso pensamos que el balance es positivo", dijo el jefe comunal a Rosario/12, para después reconocer que "seguramente en cinco o diez años deberán aplicarse algunas medidas restrictivas al tránsito en distintas arterias de la ciudad si es que persiste el crecimiento de la actividad económica y del parque automotor". De cara a la discusión en el Concejo, Lifschitz rechazó la postura de la bancada justicialista, que promueve una prórroga por sólo doce meses.

El mensaje firmado por el intendente y la secretaria de Servicios Públicos, Clara García, promoviendo una nueva prórroga al ingreso de los vehiculos a la city, llegó el jueves al Palacio Vasallo. El oficialismo pretende comenzar a debatir el proyecto el lunes en comisión para conseguir la aprobación de la iniciativa antes de que expire el plazo contemplado por la ordenaza vigente (mediados de junio).

Lifschitz reiteró que a criterio del Departamento Ejecutivo, los resultados de la experiencia han sido "altamente positivos. Ha quedado demostrado por los monitoreos permanentes realizados por la Municipalidad, así como por la satisfacción manifestada por los representantes de las cámaras comerciales en cuanto a las mejoras observadas en sus actividades.

En diálogo con Rosario/12, el intendente destacó que "los índices ambientales de contaminacion tanto del aire, el ruido y el tránsito no se han modificado en estos tres años con el tránsito habilitado para circular en el centro, no han empeorado por debajo de los niveles aceptables".

En ese marco Lifschitz aclaró que la propuesta del municipio apunta a continuar con la liberación vehicular por otros dos años, lapso durante el cual "seguiremos estudiando el tema y monitoreando las variables ambientales de la zona para evitar que se contamine la zona".

Lifschitz salió al cruce de las quejas de algunos vecinos y automovilistas en torno al congestionamiento que se registra a diario en la city. "No es un tema privativo del centro o del microcentro. Lo que está ocurriendo es que al crecer la actividad económica y el parque automotor son muchas las calles congestionadas", indicó. "Por esa razón -continuó el jefe comunal-, seguramente en cinco o diez años será necesario adoptar medidas restrictivas al tránsito pero no solamente en el centro sino en distintas arterias".

Al respecto, según comentaron a este diario voceros de la Dirección de Tránsito, en el municipio evalúan distintas alternativas para el mediano plazo. Entre ellas se menciona habilitar el ingreso de los vehículos de acuerdo a la terminación de la patente (par o impar) o bien cobrar para ingresar al microcentro, como sucede en Londres.

Ante la inminente discusión parlamentaria del mensaje, el titular del Palacio de los Leones adelantó su rechazo a la propuesta del PJ. El presidente del bloque justicialista, Arturo Gandolla, había dicho que la bancada que conduce avalará la continuidad de la apertura vehicular en la city pero sólo por 12 meses en lugar de dos años.

Para Lifschitz "no tiene sentido aprobar la prórroga por sólo un año. A nuestro entender dos años es un plazo breve y razonable durante el cual la mayoría de las variables no se alteran sustancialmente. De todas formas es un tema que deberá discutir el Concejo".

En la comisión de Servicios Públicos el socialismo cuenta con tres ediles sobre siete integrantes entre las cuales se encuentra su aliada, Daniela León. Con el voto de la concejala León en la comisión, el PS podrá darle despacho al proyecto y después necesitará mayoría simple en el recinto para sancionar la ordenanza.