La Policía Comunitaria debutó ayer en barrio Las Flores Este. Los 40 agentes entrenados con ese perfil se ocuparán del sector comprendido entre Moreno, Batlle y Ordóñez, San Martín y Circunvalación. En total, los policías comunitarios recorrerán a diario 44 manzanas para estar más cerca de los vecinos. El ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, que encabezó junto a la intendenta Mónica Fein el acto oficial realizado en Moreno y Arrieta, donde está montada la estructura que funcionará como Casa de la Policía Comunitaria, señaló que los resultados de la experiencia deberán verse "en el menor tiempo posible". Para Fein, en tanto, el debut de los agentes comunitarios evidencia un cambio de paradigma de una policía que es necesaria para la ciudad. "La experiencia nos permitirá volver a establecer la confianza entre el vecino y la policía", precisó la mandataria (ver aparte). El director de Proximidad Policial provincial, Juan Neffen, adelantó que la segunda etapa del programa se implementará en los barrios Ludueña y Tablada.

El lanzamiento de la segunda experiencia de Policía Comunitaria en la provincia -la primera comenzó en el barrio santafesino de Barranquitas- generó ayer expactativas entre los vecinos del barrio Las Flores Este, en la zona sur de la ciudad. Si bien podía reconocerse la presencia de varios funcionarios provinciales y municipales, legisladores nacionales y provinciales, concejales, y jefes policiales, gente del barrio decidió, a pesar del mal clima, participar del acto de presentación del nuevo dispositivo de seguridad. Además de la Casa de la Policía, se presentaron dos automóviles y cuatro motos cero kilómetro.

Para Lamberto, la consideración ciudadana respecto a la Policía Comunitaria, a partir de la experiencia en la capital provincial es "muy alta", aunque remarcó que se trata de una prueba piloto. "Nos parece que hay que ir despacio, tener un grupo capacitado de policías, entrar en diálogo con el vecino, que debe ser profundo y fuerte, sobretodo en un barrio que ha tenido sus problemas y conflictos, y tratar de lograr que esto se extienda en el tiempo con el ingreso de otras áreas del Estado, tanto nacional, provincial como municipal, tratando de que no sea solamente un ingreso vinculado al área policial", señaló el ministro.

"Lanzamos este programa en el marco de un Plan de Seguridad Democrática anunciado por el gobernador Antonio Bonfatti en diciembre del 2012, y se contextualiza con el Plan Abre, el programa destinado a sumar todas las acciones y actores que realizan iniciativas desde lo social de todos los Ministerios. Trabajamos para que la Policía Comunitaria acompañe el rempoderamiento de los vecinos en el espacio público para que estos programas puedan tener mayor impacto", indicó Neffen.

El funcionario precisó que los 40 agentes comunitarios que trabajarán en un radio de 44 manzanas, donde se asientan parte de los barrios Las Flores Este, 17 de Agosto y La Granada, acompañados por los referentes sociales, intentarán establecer un vínculo de mayor proximidad con los vecinos, "con políticas transparentes respecto a cómo se realiza el trabajo, con rendiciones de cuentas en audiencias públicas". Según Neffen, tienen relevados a varios actores institucionales, como los Centros Comunitarios, el Centro de Salud Pocho Lepratti, la Escuela Serrano, con los que realizaron un trabajo previo para articular acciones conjuntas en materia de prevención.

Además, la idea es implementar diferentes programas, como el Volver a Estudiar, Viveros Inclusivos, Refacción de Comisarías y Recuperación de Clubes Deportivos, entre otros. "La Policía Comunitaria irá permitiendo que esto se desarrolle en un marco de una convivencia pacífica", indicó Neffen, para quien la apertura de una sede policial "con tantos vecinos, sin dudas llama la atención, como que se hayan inscripto en Rosario más de 2600 personas para integrarla. Ahora deberemos activar un canal de participación con la comunidad, activar ese lazo".

Los policías comunitarios, que recorrerán a pie las manzanas asignadas, les dejarán sus tarjetas personales a los vecinos para que los puedan llamar a sus celulares, incluso enviarles correos electrónicos. "Tienen un referente único que es el que toma su cuadra, que tendrá la capacidad de tomar denuncias en los paseos públicos porque hay un déficit de denuncias en las comisarías", reconoció Neffen. Luego de su implementación en Las Flores Este, el funcionario adelantó que en una segunda etapa avanzarán en los barrios Ludueña y Tablada.

Fernando, uno de los tantos adolescentes que se acercaron hasta Moreno y Arrieta, dijo a este diario que "se ve reflejada la voluntad del Estado, que nos está abrazando nuevamente, en cuidar a sus ciudadanos. Hace un tiempo veníamos con problemas de inseguridad, esta es una buena medida para erradicar toda la violencia que se está generando. Muchos jóvenes de este barrio, que son gente de bien, cuando van a buscar trabajo los discriminan. Esto nos va a permitir limpiar el nombre del barrio".

"Las expectativas son buenas, muy buenas, porque estábamos pasando muy malos momentos en este sector. Para mí esto es muy positivo, la idea es que quede para siempre", señaló María Eugenia, vecina del lugar, quien de todos modos destacó que "ahora hay una mejoría, hay un poco más de tranquilidad con la llegada de Gendarmería. En esta placita teníamos un muerto por mes, esto era bastante peligroso para todos los chicos".