CIUDAD › POLéMICO FALLO DE LA CáMARA PENAL AL DESPROCESARLO
› Por Lorena Panzerini
La Cámara Penal de Rosario revocó el procesamiento del empresario cordobés Miguel Aún, quien había sido acusado por "encubrimiento", luego de ser víctima de una salidera en Córdoba y Corrientes, en marzo de 2012, que terminó con la muerte de uno de los presuntos ladrones. La resolución alcanza también a la esposa del comerciante, a quien --según declararon-- le devolvieron el bolso con el dinero que había sido objeto del delito. En el mismo fallo, los jueces de la sala III ordenaron que se remitan copias de lo actuado a la Fiscalía Federal para que allí decidan si es necesario investigar en relación al monto que había en el bolso, y "a fin de que adopte la conducta que pueda corresponder".
En septiembre de 2012, Aún y su esposa fueron acusados de "encubrimiento agravado" por el juez Javier Beltramone, quien entendió que el comerciante "mintió" sobre el dinero sustraído (dijo que no fueron 100 mil, sino 500 mil pesos) y que --según la víctima-- fue "devuelto". Según estimó el magistrado en su momento, el ocultamiento de la suma fue "perjudicial" para la investigación del hecho en el que Aún resultó herido de bala en una pierna, tras forcejear con uno de los autores del robo.
El asalto ocurrió la tarde del 16 de marzo de 2012, frente a la Bolsa de Comercio de Rosario. Aún había viajado para una operación financiera y fue asaltado mientras caminaba con un custodio de la casa de cambio a quien le pidió que lo acompañara a la cochera. En ese trayecto fue sorprendido por dos hombres en moto. Uno de ellos se bajó del rodado, forcejeó con la víctima y le disparó en las piernas, pero logró arrebatarle el dinero. Antes de la huída, el custodio de la financiera céntrica cruzó una serie de disparos con los presuntos ladrones y, como resultado, Matías Doldán -uno de los ladrones- fue herido de bala y perdió la vida en Alvear y Santa Fe, durante la fuga.
Al día siguiente del hecho, la víctima del robo --que había quedado internado en Rosario-- dijo que le habían devuelto el dinero y que su socio se lo había llevado a Córdoba. Para el juez de primera instancia, Aún había "mentido para evitar que se conociera la existencia real y concreta del origen del dinero". Y ofició a la Justicia Federal para que se investiguen delitos de su competencia.
Tras la apelación del abogado del matrimonio cordobés, quien entre otras cosas se quejó de que "es erróneo que el bolso robado sea el instrumento del delito, ya que el instrumento sería el medio material usado para ejecutar tal hecho"; los camaristas Guillermo Llaudet, Georgina Depetris y Otto Crippa García consideraron que el procesamiento fue un "yerro".
Sobre la afirmación de que "los imputados mintieron con el fin de evitar que se conociera la existencia real y concreta del dinero", señalaron que "el magistrado procura la adecuación típica e imputa como delito anterior al robo seguido de muerte que se avoca a investigar". Y agregaron que "nada habilita probabilizar que eventuales mentiras u ocultamientos, vinculadas a dinero que era de su propiedad, se relacionen en los términos pretendidos con el ilícito que culminó con una muerte".
Por otro lado, el año pasado sentó precedentes un fallo de la Sala II con una resolución similar a la de este caso. Se trata del procesamiento por encubrimiento al joven entrerriano Juan Pablo Baggio, por una salidera en la que falleció el dirigente deportivo de Gualeguaychú, Julio Bereciartu, en octubre de 2012. Esa causa volvió a primera instancia, y ahora está en manos del juzgado de Instrucción 10.
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