CIUDAD
LA MUNICIPALIDAD DESMINTIO CON PRUEBAS DENUNCIA DEl TIGRE
"La denuncia es falsa y tanto el municipio rosarino como el Servicio Público de la Vivienda y el Plan Rosario Hábitat son ajenos a los contratos y personas mencionadas", dijo ayer, con voz fuerte y conmocionado, el secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza, respecto de la denuncia que hizo pública el ex intendente de Rosario, Héctor Cavallero, sobre la supuesta utilización de la administración socialista de más de 2 millones de pesos para la campaña de 1999, a través de contratos que involucraban dineros del Banco Interamericano de Desarrollo. Zabalza explicó que el Rosario Hábitat comenzó en 2001, cuando Cavallero lo presentó como utilizado en 1999, por lo que fue una especie de "montaje" a partir de otro listado que tiene relación con el BID pero que fue decidido en el ámbito del Ministerio del Interior que conducía Carlos Corach, mientras estaba a cargo del área de Relación con las provincias el santafesino Rodolfo Vaquiano. "Fue en plena época menemista", sostuvo Zabalza y dejó flotando algunos interrogantes: si el municipio nunca firmó esos contratos quién lo hizo y si los mencionados en la lista nunca fueron contratados, quién cobró los dineros citados.
Zabalza se hizo cargo ayer de la explicación pública en la propia intendencia, aunque "semejante brutalidad" de Cavallero no daba para que el intendente Miguel Lifschitz se pusiera a contestar, se decía ayer en lo pasillos, acompañado del secretario de Hacienda, Carlos Fernández, y del antecesor de éste, Angel Sciara, y el titular del SPV, Gerardo Barro. Zabalza fue tajante: "La lista dada a conocer por Cavallero no existe como tal en la web del BID" y aseguró que la que dio a conocer el Tigre estaba "editada", lo que significa que de un original que tiene muchas más páginas -y que el secretario levantó con su mano izquierda para mostrarla a los periodistas- se tomó una parte: "Está cortada, rearmada y con agregados de textos", dijo. La exposición vehemente de Zabalza estuvo apoyada con una proyección que remarcaba cada afirmación. "La parte inferior de las listas tiene agregados a mano hechos, es evidente, por el denunciante... Todo está armado".
La Municipalidad dijo ayer que la lista que exhibió quien hoy es funcionario del gobierno provincial no forma parte de contratos realizados en ningún momento por la administración de Binner entre julio y diciembre de 1999. También desmintió que tuviera alguna relación con el SPV ni con el Programa Rosario Hábitat que se creó en 2001.
Zabalza se detuvo para hace mención al listado de personas "que viven de su trabajo y están profundamente preocupadas" y que tienen como antecedente haber participado "de alguna actividad del BID" y que aparecen cobrando abultadas cifras en dólares e involucradas en una denuncia a través de la Municipalidad. "Eso no existe en el campo de la realidad", acotó. Citó en especial dos casos: el de Adriana Stamatti de quien dijo que era empleada de planta municipal y había participado en el 99 de una actividad del BID, dejó allí sus datos pero nunca tuvo un contrato. El otro ejemplo fue el de Daniel González sobre quien señaló que trabajó en arquitectura hospitalaria y "jamás en su vida firmó un contrato, ni trabajó en el Rosario Hábitat ni en el SPV".
El argumento más fuerte que presentó la Municipalidad es que el listado publicado es de 1999 y que el programa Rosario Hábitat se firmó en octubre de 2001 -la primera remesa de dinero ejecutado es del 2002- y que el préstamo que recibió el SPV tuvo el número 1307 y el nombre de "Mejoramientos de Barrios de Rosario". Mientras tanto el listado publicado pertenece, según explicó Zabalza, a otro préstamo que llevó otro número, el 1068 del programa "Grandes Aglomerados Urbanos-Inversión en Grandes Ciudades" que se decidió en la órbita del Ministerio del Interior a través de una unidad ejecutora especial del BID.
El ex intendente Cavallero formuló la acusación y sostuvo que los contratos a los que hizo alusión insumieron la cifra de 2 millones 300 mil dólares "usados casi en su totalidad en la campaña de Hermes Binner" cuando fue reelecto frente al Palacio de los Leones en 1999.
Las explicaciones deben ser pedidas, entonces, donde corresponde y ese ámbito es el Ministerio del Interior. En el salón Carrasco quedó planteada que la acusación de Cavallero quedaba dirigida por elevación hacia el ámbito nacional. "Estamos hablando de 1999, época menemista, así que si hay que pedir alguna explicación hay que hacerlo con la gente que estuvo allí", señaló Zabalza. En ese momento era ministro del Interior Carlos Corach y un hombre de Santa Fe, Rodolfo Vaquiano, era el secretario de Relaciones con las Provincias.
La administración municipal dijo que esperaba una denuncia judicial para contestar, habló de "operación política" y concluyó que el BID tiene sus mecanismos de control y que si una auditoría no está aprobada "suspende el crédito" y aquí no sólo "no se suspendió jamás con Rosario", que inauguró 234 viviendas con la presencia del presidente Néstor Kirchner.
"Nos preocupa que se hable tan livianamente de corrupción cuando se trata de un programa que ayudó a transformar la realidad urbana, social y política de Rosario. Si no hubiésemos tenido el crédito de Grandes Aglomerados Urbanos, con los recursos limitados de coparticipación y sin autonomía en el municipio no hubiésemos podido demostrar que la ciudad puede", concluyó el secretario de Gobierno.
Sciara explicó que con el crédito de Grandes Aglomerados Urbanos se hicieron -y aún se ejecutan- accesos a la ciudad, el Distrito Sudoeste y el nuevo HECA.
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