Rosario vivió ayer un paro distinto a los anteriores por su nivel de acatamiento: la adhesión del transporte de pasajeros y de carga condicionó la actividad, pese a que la adhesión del universo gremial a la medida fue despareja. Circularon taxis y los hospitales públicos mantuvieron guardias, en tanto los empleados mercantiles, municipales y bancarios trabaron con normalidad. En los ingresos a la ciudad se instalaron piquetes que no impidieron el tránsito aunque restringieron a un carril el paso de los vehículos. La actividad en las escuelas públicas fue nula como consecuencia de la falta de transporte sumada a la adhesión de los docentes afiliados a Amsafe, pero en los colegios privados la actividad fue normal. La Asociación Empleados de Comercio informó que el 95 por ciento de los trabajadores mercantiles asistió a su trabajo.

En la Universidad Nacional de Rosario, los docentes e investigadores nucleados en Coad cumplieron la segunda jornada de paro, ya que desde el lunes se había decidido una medida de fuerza de 48 horas por mejores salarios. La medida alcanzó a las 12 facultades y tres escuelas secundarias que dependen de la UNR.

En el cordón industrial del Gran Rosario, el paro lo cumplieron trabajadores de la industrial naval, personal de balizamiento, camioneros, portuarios y ferroviarios, entre otros. Pero allí no hubo piquetes.

Una concentración de camiones del sindicato de Recolectores y de Carga obstruía el cruce de la avenida Presidente Perón (ex Godoy) y Circunvalación lo que dificultó el tránsito en ese acceso a Rosario, informó la Agencia Provincial de Seguridad Vial.

Pasado el mediodía la Asociación Empleados de Comercio llevó a cabo un relevamiento que determinó que alrededor del 95 por ciento de los mercantiles asistió a sus lugares de trabajo en supermercados e hipermercados. En los shoppings y otras grandes superficies, la presencia de los trabajadores registraba, al mediodía, un porcentaje similar. En los negocios ubicados en el centro, mayoritariamente en las peatonales y en calle San Luis, la asistencia llegaba al 98 por ciento. En los negocios más chicos, ubicados en distintos barrios de la ciudad, los empleados se hicieron presentes en su totalidad.

"Estos guarismos, que son similares a los registrados en los últimos paros, demuestran una vez más que los trabajadores mercantiles pudieron llegar a sus lugares de trabajo pese a no haber transporte público de pasajeros. Lo hicieron trasladándose en motos o en autos particulares, superando los inconvenientes derivados de la decisión de la UTA", rezaba el texto de prensa. De igual manera el documento gremial aclaraba que "si bien es cierto que algunas de las razones invocadas para llevar adelante la medida de fuerza son válidas, desde la Asociación Empleados de Comercio de Rosario entendemos que este no es el momento para paralizar al país". "Coincidimos en que al salario no se le deben aplicar impuestos -remarcan- pero no debemos facilitarles el terreno a la usura internacional, que a través de los buitres y disputas partidocráticas pretenden destruir al país".

Desde las 10 y hasta las 15, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) mantuvo una interrupción en el cruce de la autopista a Buenos Aires y avenida Circunvalación y también en Juan José Paso y Circunvalación. Sobre esa misma avenida, a la altura de Presidente Perón se sumó una concentración de camiones y recolectores de residuos que aunque no impidieron el paso, lo redujeron generando largas colas de vehículos en horas pico.

También se registraron, hasta las 15, complicaciones en las rutas de la región. En los kilómetros 0 y 19 de la autopista Rosario Santa Fe estuvo interrumpido el paso de camiones; además, se registraron demoras en la ruta A 012 y la autopista a Buenos Aires.

Una de las pocas voces locales que se escuchó fue la del secretario general de la CGT Rosario y referente del Sindicato de Camioneros, Rubén López. Negó que el paro "tenga motivaciones políticas" y remarcó que "son reclamos que tienen mucho tiempo". A la vez pidió que el gobierno "se siente a negociar aumentos, pero sin techo y sin piso".