Los trabajadores municipales llegaron a un acuerdo salarial con el municipio que entre el domingo por la tarde y ayer a la mañana formalizó el ofrecimiento del 20 por ciento de aumento, bonificable y remunerativo para todos los trabajadores y también para los jubilados y pensionados. El plenario de delegados que se preparaba para organizar el paro de 72 horas que comenzaría hoy, aceptó por unanimidad la propuesta y levantó la medida. El aumento escalonado corre desde el 1º de agosto pasado con un 10 por ciento mientras que otro porcentaje igual se aplicará a partir del 1º de noviembre. "Es el primer aumento genuino que conseguimos en mucho tiempo, porque va al básico y tiene efecto sobre todos los porcentajes que se cobran por asignaciones diversas, funciones y antigüedad", dijo a este diario el secretario adjunto del Sindicato de Trabajadores Municipales, Antonio Ratner, mientras que el intendente Miguel Lifschitz dijo que "se trata de un gran esfuerzo para el municipio ya que se aumentará la masa salarial en 70 millones de pesos en 2007". "No teníamos opción, estábamos entre la espada y la pared -señaló Lifschitz- porque un paro de 72 horas trae innumerables inconvenientes a los vecinos de Rosario, pero era una decisión difícil de tomar en el marco de una administración como la de Rosario, equilibrada y que no gasta más de lo que puede gastar".

Ratner recordó que las negociaciones por el aumento comenzaron después del 8 de mayo cuando se logró el blanqueo de las sumas fijas y se continuó después de la reunión paritaria del 12 de junio cuando los intendentes "se plantaron en que no podrían dar aumento de sueldo por lo que restaba del 2006". Desde ese momento se delineó el aumento a pedir que "por otro lado es el que como mínimo negociaban los distintos gremios en todo el país. Así llegamos a la discusión local".

El dirigente lamentó que "no se nos escuche y que siempre haya que llegar a la medida del paro para que se tenga en cuenta lo que piden los trabajadores" y puso como ejemplo que el gremio había convocado a plenario de delegados para la mañana de ayer con el objetivo de organizar todo lo relacionado con la medida de fuerza que duraría 72 horas "y recién entre el domingo por la tarde y el lunes a la mañana nos hicieron la propuesta que consideramos que podía llevarse ante el gremio". Las negociaciones del sindicato se manejaron con el intendente Lifschitz y el secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza.

El aumento acordado comprende un 10 por ciento a partir del 1º de agosto y otro 10 por ciento a partir del 1º de noviembre, con carácter remunerativo y bonificable. "Este es el primer aumento genuino, al básico, que no teníamos en muchos años", dijo Ratner. El incremento beneficia a los 9663 trabajadores municipales y también a los jubilados y pensionados del gremio, es decir que abaca a casi 15.000 familias.

Desde el sindicato se señaló también que, además del acuerdo, queda trabajando una mesa de relaciones laborales que estudiará los casos particulares y la aplicación del aumento para cada categoría.

"Creemos que hay que pensar si para esta mejora de salarios era necesario que hiciéramos paro... Se podía haber evitado a través de la negociación y el diálogo. Por nuestra parte pedimos disculpas a la población por las incomodidades causadas pero no teníamos forma de defender el pedido del aumento salarial", precisó Ratner.

Sobre los reclamos de la Municipalidad a la provincia en concepto de coparticipación y los cruces públicos que se mantienen sobre el tema, el secretario adjunto del gremio opinó "que hay que discutir y esclarecer todo lo relacionado con la coparticipación" porque "más allá de cual sea el partido gobernante si los recursos corresponden a la ciudad deben llegar". Además opinó que tal vez la mejor forma de echar luz sobre un terreno tan complejo "sería el camino de la judicialización y que se determine, si a Rosario le corresponde tanto que se le pague eso que le corresponde. De lo contrario se estará dos o tres años con la Municipalidad que reclama y la provincia que dice que aumentó lo que debía aumentar".

Lifschitz también lamentó los paros y como había dicho el gremio "preferimos la negociación, no es necesario llegar a los paros". Señaló que el acuerdo con el gremio municipal representa "un gran esfuerzo y un gran compromiso para el municipio" ya que para este año representa 7 millones y medio de pesos adicionales a los que ya significaron "los 25 millones que habíamos otorgado en el primer semestre". Esta última cifra es la que el gremio define como el blanqueo. El aumento del 20 por ciento escalonado remunerativo y bonificable significará para el 2007 un incremento de la masa salarial del municipio de 70 millones "por lo que deberemos evaluar algunos ajustes en los programas de obras y otros emprendimientos" pero "no teníamos opciones porque frente a un paro de 72 horas es muy difícil sostener la situación y esto se da en el marco de una Municipalidad equilibrada y que no gasta más de lo que debe gastar de acuerdo a sus recursos".