Cayó un nuevo integrante de la banda delicitiva que operaba en complicidad con la asociación ilícita policial a cargo del titular de la sub 26ª de Villa Gobernador Gálvez, Maximiliano Maldonado. Pedro Damián Leiva, alias Oreja, fue detenido en Centenario 80 bis, en la zona sur como parte del clan, y además está señalado por la muerte de Alcides Cuevas, asesinado en julio pasado durante una entradera en la casa de un vecino suyo, en Villa Gobernador Gálvez. Se trata de un tercer miembro de la banda de civiles que se dedicaba a cometer entraderas, robos a bancos y escruches, con protección y apoyo de un grupo de policías, cuyos integrantes fueron imputados anteayer. Hoy, el juez Gustavo Pérez de Urrechu decidirá si los implicados quedan en prisión preventiva, mientras avanza el proceso para llevarlos a juicio. Además, Leiva será llevado a audiencia imputativa. "Eran dos bandas independientes: el grupo de policías tenía determinadas tareas de inteligencia previa y encubrimientos posteriores; mientras que los civiles cometían los hechos", dijo la fiscal Viviana O`Connel, acerca de lo publicado ayer por este diario.

El nuevo arrestado, integrante de la banda de civiles, tiene 19 años y una causa abierta por el crimen de un hombre de 49 años que intentó defender a su vecino de Oppici al 2300, en VGG. Hoy, en audiencia imputativa se le achacará ese delito y también será acusado como parte del grupo que robó el banco Credicoop de General Lagos, tras sacar armas de la seccional sub 13º de esa localidad; entre otros hechos que serán detallados por la fiscal.

"Oreja" fue detenido por efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) tras un allanamiento realizado en Centenario 80 bis, en la zona sur de Rosario; y en cuanto al homicidio por el que era investigado, hoy también sería imputado por el fiscal Miguel Moreno.

Las bandas fueron detenidas el jueves pasado, tras una investigación de seis meses, que partió de un allanamiento frustrado para la fiscalía ante el presunto aviso previo de personal de la comisaría sub 26b 26ª, tras el robo a una vivienda de la zona. En el transcurso de ese tiempo, la fiscal O`Connel detectó que en subcomisaría había un cúmulo de irregularidades: desde robo de alimentos por parte del propio jefe, cobro de pesos a familiares de detenidos para que éstos deambulen sin control por la seccional, hasta delitos conjuntos y protección para una banda de civiles, de la que todavía quedan tres prófugos.

Los policías acusados de conformar una banda son el titular de la seccional sub 26º, Maximiliano Maldonado, de 43 años, quien fue acusado como jefe de la asociación ilícita; su secretario Carlos Morgan, de 39, sindicado "organizador"; los suboficiales Nara Rodaz, de 28 años, pareja de Maldonado, quien permanece en prisión domiciliaria por tener un embarazo riesgoso; el suboficial Fernando Acosta, de 33 años; y el cabo de la seccional sub 13ª, Javier Lanero, de 39.