La Mesa Nacional del Partido Socialista resolvió anoche no apoyar a ninguno de los dos candidatos presidenciales en carrera que pugnarán en el ballottage del 22 de noviembre. "Tanto (Daniel) Scioli como (Mauricio) Macri tienen perfiles coincidentes. Ninguno de los dos responde a las expectativas que tenemos como socialistas, por lo que la decisión que hemos consensuado es no avalarlos porque entendemos que no garantizan los valores que sostuvimos en la campaña y que nutren el programa del Frente Progresista", explicó el diputado nacional Juan Carlos Zabalza a Rosario/12, al término de una reunión que se realizó en la sede partidaria de Ciudad de Buenos Aires y que les insumió unas seis horas.

La posición --aclaró Zabalza-- no implica por ahora que el mensaje sea dejar a su electorado en libertad de acción, ni tampoco una invitación a votar en blanco, como sí ya lo ha expresado el excandidato presidencial del Frente de Izquierda, Nicolás Del Caño. "Esa precisión surgirá en los próximos días, cuando elevemos estas conclusiones al Comité Ejecutivo Nacional del partido", prolongó el legislador, integrante de la Mesa que preside Hermes Binner y que también componen, entre otros, las rosarinas Alicia Ciciliani y Lucrecia Aranda.

"Como Frente Progresista, intentamos construir una alternativa de centro izquierda que propuso un cambio real, verdadero, pero la gente no la percibió como tal y somos respetuosos de la voluntad popular. Pero no por eso vamos a resignar nuestras convicciones. El perfil de Scioli y el de Macri son lejanos a nuestra concepción de cómo gobernar el país", dijo Zabalza.

Consultado sobre las declaraciones del gobernador Antonio Bonfatti acerca de que jamás votaría a la derecha, el diputado rosarino replicó: "¿Y cuál de esos dos candidatos puede decir que no es de derecha? Tienen perfiles coincidentes, y aquí hace falta un cambio para impulsar políticas públicas que de veras luchen contra la desigualdad, no políticas clientelares sino participación ciudadana".

Zabalza aceptó que la concepción del rol del Estado difiere entre la plataforma de Cambiemos y del Frente para la Victoria, aunque en este caso -en su opinión- "sólo lo hace en el discurso: el socialismo ha votado a favor de algunas leyes promovidas por el gobierno nacional, pero que se han quedado como políticas posibles hacia adelante".

El socialista argumentó la equidistancia con ambos espacios. Y puesto a imaginar el interlocutor del futuro gobierno de Miguel Lifschitz en la Casa Rosada, reprochó pasajes de la relación de las gestiones Binner y Bonfatti con el kirchnerismo, y neutralizó suspicacias. "En un país federal donde sus mecanismos institucionales funcionen, un gobierno provincial debe poder convivir sin contratiempos con un gobierno federal de otro signo político. Pero el kirchnerismo ha tenido un comportamiento patológico con Santa Fe al no otorgar avales para créditos que no le hubiesen costadonada al Tesoro nacional, al discriminar a la provincia en los programas de construcción de viviendas. Se ha estigmatizado la provincia con el narcotráfico, cuando ese tema requiere de una política federal que no la hubo. Queremos que el sistema funcione como debe ser, y pensamos que ni Scioli ni Macri garantizan eso", rechazó.

Ayer el intendente de Santa Fe, José Corral, avisó que el radical que no vote a Macri vaya pensando en desafiliarse (ver página 3). Estos chispazos de sus socios políticos pasaron por encima de los socialistas reunidos. "Discrepamos con la posición institucional de la UCR --señaló Zabalza--, pero hemos priorizado el Frente Progresista. Luego habremos de darnos a la tarea pendiente de hacer autocrítica y replantearnos estas cosas". "Hoy nuestra posición es no apoyar a ninguno en el ballottage", concluyó.