Liliana Guzmán se dedica a confeccionar prendedores personalizados, como único medio de vida para mantener a su hija pequeña. El 16 de marzo pasado, no tenía dinero para darle la merienda a la nena y recordó que tenía un trabajo sin cobrar. Agarró a su hija, la subió a su moto, se pusieron el casco y salieron. Cuando llegaron a Lavalle y San Lorenzo un control de la Guardia Urbana Municipal la paró. "Vivo acá a dos cuadras", respondió Liliana cuando le dijeron que tenían que llevarse su moto, porque ella no encontraba -en la desesperación- la póliza de seguro. "No me digas que me la vas a sacar, yo trabajo con la moto, la necesito. Ustedes están pelotudeando acá y en aquella esquina acaba de pasar una mujer con tres chicos en la moto y sin casco", insistía ella, en plena tarde. Un hombre vestido de policía le pidió que dejara de gritar, y cuando ella le contestó, el hombre la tomó de un brazo y la zamarreó. Todo quedó plasmado en una filmación casera que fue entregada a la fiscal Karina Bartocci, de Violencia Institucional y Corrupción Policial. La denunciante asegura que el policía es subcomisario de la seccional 7º.

Cuando el uniformado tomó del brazo a Liliana, para apartarla de la moto, donde ella estaba apoyada y su nena encima, ella empezó a gritar que no le sacaran a su hija, cuando vio que la bajaron para que el agente de la GUM subiera el rodado al camión. Enseguida se amontonó gente que empezó a gritarle al personal, en defensa de la mujer, pero nada parecía frenar la situación.

Desesperada, Liliana se contactó con la ONG Ademul, que dirige Fernanda Serna -víctima de violencia de género- para que la ayudaran a radicar la denuncia, ya que no sabía a quién recurrir, porque asegura que quien la tomó del brazo a la fuerza es el subcomisario de la seccional de su barrio, y que ese día le negó identificarse.

Serna acompañó a la mujer al Ministerio Público de la Acusación y desde el miércoles pasado la causa está en manos de la fiscal Bartocci, quien analiza las imágenes del video que filmó un vecino que vive frente al lugar donde se realizaba el operativo aquella tarde. "Yo reconozco que está mal llevar a la nena, pero no tenía con quién dejarla y la llevaba con casco sentada adelante mío, donde yo la puedo agarrar. Deberían considerar estas cuestiones y ver de qué modo podemos trasladar a los niños pequeños en moto; porque yo ese día no tenía un peso para darle la leche a mi hija", relató la mujer a este diario.

"Este policía me dijo que me iba a llevar presa, porque le dije que estaban pelotudeando y que yo acababa de ver una situación de tres chicos arriba de una moto en la otra esquina. Además, se enojó porque le pedí que se identificara y en la desesperación que tenía le dije que yo trabajaba en los medios de comunicación y que lo iba a escrachar. El me dijo que no tenía por qué identificarse, pero yo sé que es el subcomisario de la 7ª; el que me maltrató en todo momento", contó la mujer.