La Comisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal sesionó ayer nuevamente para intentar destrabar la discusión del incremento del boleto; aunque las posturas, tanto del oficialismo que cuenta con el apoyo del PRO, como la de los 14 ediles que no dieron quórum el pasado jueves, continúan inflexibles. Mientras la comisión ratificó el despacho que propone un boleto de 8 pesos en lo inmediato y a 8,50 en julio, los opositores proponen que la provincia incorpore al Fondo Compensador los 100 millones de pesos anunciados para financiar las unidades nuevas, que sumado al proyecto para duplicar el porcentaje del impuesto al sello, generarían un aumento menor. Frente a esta situación, el titular de la comisión, Carlos Comi (ARI.CC), convocó para hoy a las 9 a otra reunión. "Les pedimos que esto lo tenemos que resolver, hay que hacer el mayor de los esfuerzos para que no pase lo del jueves porque no gana nadie", planteó Comi.

La reunión de la comisión, que integran los concejales que ratificaron el despacho --Comi, Verónica Irízar y Enrique Estévez (PS), Aldo Poy (PDP), Renata Ghilotti (PRO), y Eduardo Toniolli (PJ) y Marina Magnani (Unidos y Organizados), que no lo votaron-- convocó además a un buen número de ediles. La oficina del edificio Anexo quedó chica ante la presencia de la presidenta del cuerpo, Daniela León (UCR), Horacio Ghirardi (PS), Sebastián Chale (Radicales Progresistas) y Alejandro Roselló (PRO), en representación de los concejales que acompañan el incremento del boleto a 8 y 8,50 pesos.

También participaron del encuentro la mayoría de los concejales que se oponen al aumento: Juan Monteverde, Caren Tepp y Pedro Salinas (Ciudad Futura), Osvaldo Miatello (Compromiso con Rosario), Jorge Boasso (Bloque Radical), Norma López (FpV), Lorena Giménez (PPS), Fernanda Gigliani (IP), Diego Giuliano (Rosario Federal), y Carlos Cossia (Peronismo Solidario). Por la cantidad de concejales presentes, y más allá de la formalidad de la presentación de las propuestas de los ediles opositores, en la comisión se produjo un extenso debate.

Para Toniolli, vocero de la propuestas opositoras, "no se necesita de una ley para engrosar el Fondo Compensador, es una decisión excepcional a través de un decreto". Tanto el edil justicialista como Boasso dijeron esperar del oficialismo que presente alternativas. López consideró que el grupo opositor dio la posibilidad "de abrir un diálogo", después de lo que pasó el jueves. "Consideramos que 8,50 pesos es un precio que el rosarino no puede pagar", afirmó la edila kircherista.

La concejala Irízar recogió el guante y salió a bancar la parada del oficialismo. "Los 14 que llegamos a un despacho venimos trabajando, haciendo gestiones", dijo la edila socialista, a quien le parecieron "injustas" algunas declaraciones respecto a los aportes provinciales. "No es competencia provincial el financiamiento del transporte, pero el gobernador tomó la decisión de hacer un aporte", agregó Irízar, quien recordó que el pasado viernes el intendente de Santa Fe, José Corral, aumentó el transporte en un 30 por ciento por decreto.

Monteverde dijo que se debe dar una discusión política para llegar al precio final del boleto. "Son propuestas de recursos nuevos que bajaban un peso lo acordado por el socialismo y el PRO", señaló el titular del bloque Ciudad Futura. En este punto, Ghirardi argumentó que fijar una tarifa a 1,50 pesos menos de lo que arrojó el estudio de costos, es en definitiva una resolución política. "Los 14 disidentes quieren hacer cargo de la tarifa al gobernador", criticó el presidente del bloque socialista. Roselló pidió "no demonizar el acuerdo del boleto", como ellos no demonizaron el acuerdo de taxis.

"Si no se modifican las posturas, las consecuencias van a ser las mismas, debe haber un esfuerzo del oficialismo", planteó Miatello, quien recordó qu el cuerpo había votado una resolución para gestionar reuniones con el gobernador Lifschitz, pero que finalmente no prosperaron. Para Magnani, el aumento que pretende el oficialismo hará que "el sistema se desfinancie por la baja de pasajeros". Por su parte, Gigliani consideró que la incorporación de otros recursos provinciales al sistema "tiene que ver con una decisión política del gobernador que hoy tiene herramientas, hay dinero". La concejala agregó: "Si el gobierno provincial fuera de otro color político, la tendríamos a la intendenta pidiendo por subsidios".